MADRID 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación del Smidt Heart Institute del Hospital Cedars-Sinai ha demostrado por primera vez que los vasos sanguíneos de las mujeres, incluidas las arterias grandes y pequeñas, envejecen a un ritmo más rápido que en los hombres, según publican sus autores en la revista 'JAMA Cardiology'.
Los hallazgos podrían ayudar a explicar por qué las mujeres tienden a desarrollar diferentes tipos de enfermedades cardiovasculares y con diferente frecuencia que los hombres.
"Muchos en la medicina hemos creído durante mucho tiempo que las mujeres simplemente 'alcanzan' a los hombres en términos de su riesgo cardiovascular", reconoce Susan Cheng, autora principal del estudio y directora de Investigación de Salud Pública en el Smidt Heart Institute.
"Nuestra investigación no solo confirma que las mujeres tienen una biología y fisiología diferentes a las de sus homólogos masculinos --continúa--, sino que también ilustra por qué las mujeres pueden ser más susceptibles a desarrollar ciertos tipos de enfermedades cardiovasculares y en diferentes momentos de la vida".
Utilizando datos basados en la comunidad acumulados de múltiples puntos de todo el país, Cheng y su equipo de investigación realizaron análisis específicos del sexo de la presión arterial medida, un indicador crítico del riesgo cardiovascular. Los datos representaron casi 145.000 mediciones de la presión arterial, recopiladas en serie durante un período de 43 años, de 32.833 participantes del estudio con edades comprendidas entre 5 y 98 años.
Debido a que el riesgo de una persona de padecer un ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca o un derrame cerebral generalmente comienza con tener presión arterial alta, los investigadores del Cedars-Sinai revisaron sus datos masivos en busca de pistas y patrones sobre cómo la presión arterial comienza a aumentar. Luego, en lugar de comparar los datos de hombres y mujeres entre sí, los investigadores compararon mujeres con mujeres y hombres con hombres.
Este enfoque permitió a los investigadores identificar que la progresión y evolución de la función vascular de las mujeres es muy diferente a la de los hombres. De hecho, las mujeres mostraron signos de elevación de la presión arterial mucho antes en la vida que los hombres.
"Nuestros datos mostraron que las tasas de aceleración de la elevación de la presión arterial fueron significativamente más altas en las mujeres que en los hombres, comenzando más temprano en la vida", añade Cheng, la presidenta de Erika J. Glazer en Salud Cardiovascular de la Mujer y directora de Ciencias Poblacionales Cardiovasculares del Centro Cardíaco para la Mujer Barbra Streisand.
"Esto significa que si definimos el umbral de hipertensión exactamente de la misma manera, una mujer de 30 años con presión arterial alta probablemente tenga un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular que un hombre con presión arterial alta a la misma edad", precisa.
Christine Albert, presidenta fundadora del Departamento de Cardiología recientemente establecida en el Smidt Heart Institute, dice que esta nueva investigación debería ayudar a guiar a los médicos e investigadores a pensar de manera diferente cuando se trata de tratar y estudiar a las mujeres y su salud cardiovascular.