MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Centro Nacional de Salud y Desarrollo Infantil de Japón, publicado recientemente en 'The Journal of Allergy and Clinical Inmunology', señala que el tratamiento cutáneo precoz para la dermatitis atópica en bebés puede reducir la alergia alimentaria.
En el estudio se incluyeron 650 lactantes de 7 a 13 semanas de edad con dermatitis atópica y se asignó aleatoriamente un tratamiento cutáneo precoz mejorado y un tratamiento reactivo convencional con corticosteroides tópicos (TCS). A las 28 semanas de edad, se comprobó la alergia inmediata de los bebés al huevo de gallina confirmada por provocación alimentaria oral
Los investigadores observaron que el tratamiento precoz con mejoría de la función barrera de la piel redujo significativamente la alergia al huevo en comparación con aquellos que recibieron tratamiento convencional: 31,4 por ciento frente a 41,9 por ciento.
En este sentido, la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), con motivo del Día Mundial de la Dermatitis Atópica que se celebra el 14 de septiembre, ha asegurado que los resultados de este estudio son "prometedores".
El huevo es, junto a la leche, la alergia alimentaria más frecuente en los primeros años de vida. Los síntomas de la alergia al huevo suelen aparecer de forma inmediata, desde unos minutos hasta las dos primeras horas después de la ingesta.
"Lo más frecuente es la aparición de sintomatología cutánea, del tipo eritema perioral, urticaria facial o generalizada, pero también pueden aparecer síntomas de asma (broncoespasmos, sibilancias, tos), rinitis, conjuntivitis o digestivos, con diarrea, vómitos, náusea. Si están afectados más de dos órganos se considera anafilaxia", ha afirmado la coordinadora del grupo de trabajo Dermatitis Atópica y Alergia Cutánea de la SEICAP, Mercedes Escarrer.
RECOMENDACIONES DE LA SEICAP
Los pediatras alergólogos consideran que es imprescindible que los niños con dermatitis atópica sigan recomendaciones para cuidar la piel y prevenir los brotes, como usar lociones o cremas adecuadas para mantener la hidratación y evitar el picor.
Los productos hidratantes mantienen la humedad interna y regeneran la capa grasa protectora. Los niños atópicos deben usar productos hidratantes de forma abundante, varias veces al día, pero sobre todo después del lavado o el baño.
Asimismo, la ropa debe ser 100% algodón o tejidos naturales como el lino. También se deben evitar las fibras sintéticas y la lana, así como la ropa ajustada y procurar no abrigar en exceso al niño.
En cuanto al baño, debe ser de corta duración y con agua templada. Se recomienda que use jabón suave especial para pieles atópicas y no usar esponjas, además de limpiar con la mano directamente.
La ropa debe lavarse con jabón y aclararse muy bien tras el lavado para eliminar residuos de detergentes, evitando utilizar lejía y suavizantes.
Por último, la SEICAP aconseja que las uñas deben estar siempre cortas, y muy limpias, para evitar heridas por el rascado.