Un tratamiento bacteriano reduce la resistencia a la insulina y protege contra la diabetes

Archivo - Diabetes, mujer
Archivo - Diabetes, mujer - VGAJIC/ ISTOCK - Archivo
Publicado: lunes, 4 septiembre 2023 7:29

MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

Investigadores dirigidos por Hiroshi Ohno, del Centro RIKEN de Ciencias Médicas Integradoras (IMS) de Japón, han descubierto un tipo de bacteria intestinal que podría ayudar a mejorar la resistencia a la insulina y, por tanto, proteger contra el desarrollo de la obesidad y la diabetes de tipo 2. El estudio, publicado en la revista 'Nature', consistió en el análisis genético y metabólico de microbiomas fecales humanos y, posteriormente, en experimentos de corroboración en ratones obesos.

La insulina es una hormona liberada por el páncreas en respuesta al azúcar en sangre. Normalmente, ayuda a que el azúcar llegue a los músculos y al hígado para que puedan utilizar la energía. Cuando una persona desarrolla resistencia a la insulina, esto significa que se impide que ésta cumpla su función y, como resultado, permanece más azúcar en la sangre y el páncreas sigue produciendo más insulina. Ello puede conducir a la obesidad, la prediabetes y la diabetes de tipo 2.

Nuestros intestinos contienen billones de bacterias, muchas de las cuales descomponen los hidratos de carbono que comemos cuando, de otro modo, permanecerían sin digerir. Aunque muchos han propuesto que este fenómeno está relacionado con la obesidad y la prediabetes, los hechos siguen sin estar claros porque hay muchas bacterias diferentes y faltan datos metabólicos. Ohno y su equipo del RIKEN IMS han abordado esta carencia con su exhaustivo estudio y, en el proceso, han descubierto un tipo de bacteria que podría ayudar a reducir la resistencia a la insulina.

En primer lugar, examinaron todos los metabolitos que pudieron detectar en las heces proporcionadas por más de 300 adultos en sus revisiones médicas periódicas. Compararon este metaboloma con los niveles de resistencia a la insulina obtenidos de las mismas personas. "Descubrimos que una mayor resistencia a la insulina se asociaba con un exceso de carbohidratos en la materia fecal --explica Ohno--, especialmente monosacáridos como glucosa, fructosa, galactosa y manosa".

A continuación, caracterizaron la microbiota intestinal de los participantes en el estudio y su relación con la resistencia a la insulina y los carbohidratos fecales. Los intestinos de las personas con mayor resistencia a la insulina contenían más bacterias del orden taxonómico Lachnospiraceae que de otros órdenes. Además, los microbiomas que incluían 'Lachnospiraceae' estaban asociados con un exceso de carbohidratos fecales. Así, una microbiota intestinal dominada por 'Lachnospiraceae' estaba relacionada tanto con la resistencia a la insulina como con heces con exceso de monosacáridos. Al mismo tiempo, la resistencia a la insulina y los niveles de monosacáridos eran menores en los participantes cuyos intestinos contenían más bacterias del tipo Bacteroidales que de otros tipos.

Posteriormente, el equipo se propuso comprobar el efecto directo de las bacterias sobre el metabolismo en cultivo y después en ratones. En el cultivo, las bacterias Bacteroidales consumían los mismos tipos de monosacáridos que se encontraban en las heces de las personas con alta resistencia a la insulina, siendo la especie Alistipes indistinctus la que consumía la mayor variedad. En ratones obesos, el equipo observó cómo el tratamiento con distintas bacterias afectaba a los niveles de azúcar en sangre. Comprobaron que 'A. indistinctus' disminuía la glucemia y reducía la resistencia a la insulina y la cantidad de carbohidratos disponibles para los ratones.

Estos resultados eran compatibles con los obtenidos en pacientes humanos y tienen implicaciones para el diagnóstico y el tratamiento. Como explica Ohno, "debido a su asociación con la resistencia a la insulina, la presencia de bacterias intestinales Lachnospiraceae podría ser un buen biomarcador de la prediabetes. Asimismo, el tratamiento con probióticos que contengan A. indistinctus podría mejorar la intolerancia a la glucosa en personas con prediabetes".

Aunque la mayoría de los probióticos de venta libre no contienen actualmente las bacterias identificadas en este estudio, Ohno pide precaución en caso de que lleguen a estar disponibles. "Estos hallazgos deben verificarse en ensayos clínicos con humanos antes de que podamos recomendar cualquier probiótico como tratamiento para la resistencia a la insulina", concluy