MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
Con motivo del Día Mundial del Sueño, que se celebra este viernes, el jefe del servicio de Neurología del Hospital Universitario La Luz de Madrid, el doctor David Pérez Martínez, advierte de que uno de los trastornos del sueño más diagnosticado son las parasomnias, siendo la primera de ellas el sonambulismo.
Como explica el neurólogo, este tipo de trastornos engloba diversos cuadros de trastorno del comportamiento o conducta durante el sueño como el sonambulismo, los despertares confusionales o el trastorno de conducta de sueño REM. "En ocasiones, algunos pacientes pueden simular este tipo de trastornos en el seno de un trastorno epiléptico durante el sueño, por lo que es clave disponer de una valoración en una Unidad de Sueño", expresa.
Este experto destaca que el sonambulismo es el trastorno más frecuente, especialmente en sujetos jóvenes. "Las personas con sonambulismo suelen desarrollar una conducta motora mientras permanecen inconscientes. Puede salir de la cama, caminar, orinar o incluso salir de su casa si tiene accesibilidad al exterior", afirma Pérez.
Por su parte, la doctora Anabel Puente, jefa sociada del servicio de Neurofisiología del Hospital Universitario La Luz, sostiene que la mayoría de las veces estas conductas van desapareciendo con el tiempo y tienen carácter benigno. "Sin embargo, su aparición en adultos o ancianos deberían hacernos pensar en otros trastornos como el trastorno de conducta de sueño REM que requiere una monitorización y tratamiento específico", comenta.
Tal y como explica la doctora Anabel Puente, teniendo en cuenta que los comportamientos motores que tienen lugar durante las parasomnias pueden ir desde movimientos prácticamente imperceptibles hasta actividad compleja que puede poner en riesgo al paciente, "es esencial realizar un adecuado diagnóstico".
"Es fundamental realizar un registro de polisomnografía con registro de vídeo sincronizado con la actividad cerebral, ritmo cardiaco, respiración y actividad muscular", insiste la neurofisióloga. De acuerdo con el doctor David Pérez, "lo normal" es que durante el sueño los movimientos sean escasos y breves.
"Con estos estudios se valorará la presencia de actividad muscular anómala, estableciendo en qué fase de sueño se produce y su repercusión en el sueño del paciente. Pero, además permite diferenciarlos de otras enfermedades como, por ejemplo, las crisis epilépticas o el síndrome de piernas inquietas", concluye el doctor.