Los síntomas depresivos pueden acelerar el deterioro de la memoria en las personas mayores

Demencia, Alzheimer
Demencia, Alzheimer - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / WILDPIXEL
Actualizado: miércoles, 12 junio 2024 9:58

MADRID, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los síntomas depresivos están relacionados con una disminución posterior de la memoria en las personas mayores, mientras que una memoria más pobre también está relacionada con un aumento de los síntomas depresivos en el futuro, según un nuevo estudio dirigido por investigadores de la University College de Londres (UCL) y la Facultad de Medicina de Brighton y Sussex, todas en Reino Unido.

El estudio, publicado en ‘JAMA Network Open’, analizó 16 años de datos longitudinales de 8.268 adultos en Inglaterra con una edad promedio de 64 años. Los investigadores concluyeron que la depresión y la memoria estaban estrechamente interrelacionadas y que ambas parecían afectarse entre sí.

La autora principal, la doctora Dorina Cadar, del Departamento de Ciencias del Comportamiento y Salud de la UCL y de la Facultad de Medicina de Brighton y Sussex, argumenta: "Se sabe que la depresión y la mala memoria a menudo ocurren juntas en las personas mayores, pero no está claro qué ocurre primero. Nuestro estudio muestra que la relación entre la depresión y la mala memoria es bidireccional: los síntomas depresivos preceden al deterioro de la memoria y el deterioro de la memoria está relacionado con síntomas depresivos posteriores. También sugiere que las intervenciones para reducir los síntomas depresivos pueden ayudar a frenar el deterioro de la memoria".

El autor principal, Jiamin Yin, graduado de la UCL y ahora estudiante de doctorado en la Universidad de Rochester, Nueva York (Estados Unidos), destaca por su parte: "Estos hallazgos subrayan la importancia de monitorear los cambios en la memoria en adultos mayores con síntomas depresivos crecientes para identificar la pérdida de memoria temprana y prevenirla". Por el contrario, también es fundamental abordar los síntomas depresivos entre aquellos con deterioro de la memoria para protegerlos del desarrollo de depresión y disfunción de la memoria".

El equipo de investigación sugirió que la depresión podría afectar la memoria debido a cambios en el cerebro relacionados con la depresión. Estos incluyen desequilibrios neuroquímicos (por ejemplo, niveles más bajos de serotonina y dopamina), cambios estructurales en regiones involucradas en el procesamiento de la memoria y alteraciones en la capacidad del cerebro para reorganizarse y formar nuevas conexiones.

El equipo explica que los deterioros de la memoria también podrían surgir de factores psicológicos como la rumiación, es decir, el pensamiento repetitivo o la insistencia en sentimientos negativos. Por otro lado, las personas que experimentan lapsos de memoria o dificultades para retener nueva información pueden provocar frustración, pérdida de confianza y sentimientos de incompetencia, que son desencadenantes comunes de episodios depresivos. El deterioro de la memoria también puede alterar el funcionamiento diario y las interacciones sociales, lo que lleva al aislamiento social y potencialmente desencadena síntomas depresivos.

La doctora Cadar añade: "La depresión puede provocar cambios en las estructuras cerebrales, como el hipocampo, que es fundamental para la formación y recuperación de la memoria. El estrés crónico y los altos niveles de cortisol asociados con la depresión pueden dañar las neuronas en estas áreas. Sin embargo, una mayor comprensión de los mecanismos que vinculan el deterioro de la memoria y la depresión es crucial para desarrollar intervenciones específicas destinadas a mejorar el estado de ánimo y ralentizar el deterioro cognitivo en personas con depresión y deterioro de la memoria".

Para este estudio, los investigadores analizaron datos del Estudio Longitudinal Inglés sobre el Envejecimiento (ELSA), en el que una muestra de población representativa a nivel nacional en Inglaterra responde una amplia gama de preguntas cada dos años.

Las personas que comenzaron con síntomas depresivos más altos tenían más probabilidades de experimentar un deterioro de la memoria más rápido más adelante, mientras que aquellos que comenzaron con una memoria más pobre tenían más probabilidades de experimentar un aumento posterior de los síntomas depresivos. Además, los participantes que experimentaron un mayor aumento en los síntomas depresivos durante el estudio tenían más probabilidades de tener una disminución más pronunciada de la memoria al mismo tiempo, y viceversa.

No se encontró el mismo patrón para la fluidez verbal. Si bien una menor fluidez verbal se relacionó con más síntomas depresivos al inicio del estudio, los cambios en uno no predijeron cambios posteriores en el otro. Los investigadores tuvieron en cuenta una variedad de factores que podrían haber afectado los resultados, como la actividad física y las enfermedades que limitan la vida. Como estudio observacional, señalaron los investigadores, no pudo establecer causalidad.