El síndrome RED puede estar poniendo en riesgo a muchos atletas

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Archivo - La atleta Maribel Pérez - JUNTA DE ANDALUCÍA - Archivo
Publicado: jueves, 28 septiembre 2023 8:05

MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

Muchos deportistas pueden estar corriendo el riesgo de padecer un síndrome de salud y rendimiento perjudicial causado por un desajuste prolongado y/o grave entre las calorías ingeridas y las quemadas durante el ejercicio conocido como RED (Relative Energy Deficiency in Sport)-, alerta una declaración de consenso sobre el tema, publicada bajo los auspicios del Comité Olímpico Internacional (COI) en el 'British Journal of Sports Medicine'.

La prevalencia estimada del síndrome RED varía según el deporte, oscilando entre el 15% y el 80%. A menudo pasa desapercibido para los propios atletas, sus entrenadores y los médicos de los equipos, y puede verse exacerbado involuntariamente por la "cultura del deporte", debido a las ganancias percibidas a corto plazo en el rendimiento por limitar intencionadamente o no la ingesta de calorías, advierte la Declaración.

En 2014, el COI reconoció por primera vez el RED como una entidad diferenciada en una declaración de consenso. Este último consenso, elaborado por un grupo de expertos internacionales, se basa en los principales avances de la ciencia del síndrome RED en los últimos 5 años, con el objetivo de promover un mayor reconocimiento y prevención del síndrome y optimizar la salud, el bienestar psicológico y el rendimiento de los deportistas.

En particular, la Declaración destaca las nuevas pruebas sobre el papel emergente de la ingesta inadecuada de carbohidratos; el solapamiento entre el síndrome RED y el síndrome de sobreentrenamiento; el curso temporal del desarrollo del síndrome RED; la interacción entre la salud mental y el síndrome RED; y los avances en la comprensión del síndrome en atletas masculinos y paraatletas.

Además, incluye un resumen de directrices clínicas prácticas tanto para evaluar el déficit calórico persistente como para la medición segura de la composición corporal que excluye deliberadamente a los menores de 18 años, además de una herramienta de evaluación clínica actualizada (IOC REDs CAT2) que incorpora un sistema de semáforo de 4 colores para ayudar al diagnóstico preciso y a la evaluación del riesgo/gravedad.

Este sistema va desde la plena participación en los entrenamientos y las competiciones (verde) hasta el seguimiento continuado (amarillo), pasando por las intervenciones médicas intensivas y el seguimiento (naranja), hasta el apoyo médico completo, junto con la posible retirada de las competiciones y los entrenamientos (rojo).

Un déficit en la cantidad de energía disponible necesaria para mantener una salud y un rendimiento deportivo óptimos se denomina baja disponibilidad energética (LEA, por sus siglas en inglés), explica la Declaración.

A corto plazo, el organismo es capaz de adaptarse a esta situación, un proceso conocido como "LEA adaptable", pero no es capaz de hacer frente a déficits grandes, prolongados y frecuentes de la energía disponible, lo que se conoce como "LEA problemática", que da lugar a los RED, subraya la Declaración.

Aunque la edad, el sexo, los genes, los factores externos y los comportamientos pueden empeorar o mitigar los efectos, éstos pueden ser muchos y variados, ya que el organismo se ve obligado a desviar energía de los procesos implicados en el crecimiento, la reproducción y el mantenimiento, señala la Declaración.

Los efectos de las RED en el organismo pueden incluir: lteraciones hormonales, pérdida de la menstruación, disfunción eréctil, libido baja, debilitamiento de los huesos, susceptibilidad a las fracturas por estrés, dolor abdominal, calambres, hinchazón, metabolismo energético alterado, falta de hierro, insuficiente capacidad de transporte de oxígeno de los glóbulos rojos, incontinencia urinaria, deterioro del metabolismo de la glucosa y los lípidos, depresión, dependencia/adicción al ejercicio, trastornos alimentarios, deterioro de las capacidades cognitivas, como la memoria, la toma de decisiones o la conciencia espacial, alteraciones del sueño, anomalías del ritmo cardiaco y del flujo sanguíneo, reducción de la función muscular, crecimiento y desarrollo reducidos y deterioro de la inmunidad.

También afecta al rendimiento, manifestándose como menor disponibilidad para el entrenamiento y la competición como consecuencia de una lesión/enfermedad, menor respuesta al entrenamiento, tardar más en recuperarse del entrenamiento/competición, tiempos de reacción más lentos, menor motivación, menor fuerza muscular, menor capacidad de resistencia y reducción de la potencia de rendimiento.

No obstante, la Declaración señala que aún no está claro si la dinámica de la salud mental y los trastornos alimentarios difiere en función del sexo, el nivel de competición y las discapacidades físicas.

Por todo ello, la Declaración recomienda un enfoque integral de equipo para una recuperación satisfactoria, que incluya especialistas en medicina deportiva, nutricionistas, psicólogos y científicos del deporte, junto con la participación del entrenador y la familia.

Y dado que las consecuencias de las lesiones rojas pueden ser graves, debe darse prioridad a la detección precoz y a las intervenciones oportunas, añade.

Sugiere que la investigación futura debe triangular los datos de estudios transversales, a largo plazo y de intervención bien diseñados, con el fin de descubrir la complejidad de la relación entre la LEA y las RED, recomienda la Declaración.

La autora principal y miembro del Grupo de Juegos del COI, la profesora Margo Mountjoy, subraya que "el RED es frecuente en atletas de ambos sexos de muchos deportes y, aunque sabemos mucho más sobre sus causas, el conocimiento del síndrome y sus consecuencias para la salud y el rendimiento sigue siendo escaso entre los atletas, sus equipos médicos y de apoyo al rendimiento y el público en general".

"Esperamos sinceramente que esta Declaración de Consenso aumente la concienciación y la comprensión de las RED y estimule la acción por parte de las organizaciones deportivas y los científicos, así como de los equipos de salud y rendimiento de los atletas, para proteger la salud y el bienestar de los muchos atletas en riesgo de padecer este síndrome", confía.

Por su parte, el doctor Richard Budgett, Director Médico del COI, añade que "las declaraciones de consenso del COI desempeñan un papel fundamental en la traslación de la investigación y la teoría a la práctica clínica. Y esta declaración contribuirá en gran medida a proteger la salud de los atletas a través de mejoras tanto en la prevención como en la gestión de las RED".