¿Sabes que los recién nacidos pueden andar? Conoce cuáles son nuestros reflejos al nacer

Bebé
Bebé - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / EKATERINA POKROVSKY
Publicado: jueves, 19 marzo 2020 8:15

   MADRID, 19 Mar. (EDIZIONES) -

   Cuando un bebé nace ya tiene unas determinadas capacidades que le son innatas. Algunas permanecen en él ya toda su vida, mientras que otras le desaparecen poco a poco hasta volver a recuperarlas más adelante en su vida. Todo es cuestión de supervivencia.

   Según explica la Academia Americana de Pediatría, mucha de la actividad en las primeras semanas de vida del bebé es reflexiva. "Por ejemplo, cuando coloca un dedo en su boca, él no piensa qué hacer, lo succiona por reflejo. Cuando se encuentra frente a una luz brillante, cerrará sus ojos con fuerza, ya que eso es lo que sus reflejos hacen que haga. Él nace con muchas de estas respuestas automáticas, algunas las conserva por meses, mientras otras se desvanecen en semanas", aclara.

   Con ello, destaca que, aunque posiblemente pensemos que nuestro bebé es totalmente indefenso, en realidad cuenta con muchos reflejos de protección. "Por ejemplo, si un objeto viene directo hacia él, volteará su cabeza e intentará esquivarlo. Sorprendentemente, si el objeto va en un camino en el que no lo golpeará, lo verá acercarse con calma sin estremecerse. Sí, él depende mucho de mamá y papá a esta edad, pero no es totalmente indefenso", remarca.

   Mientras, en una entrevista con Infosalus, la neuropediatra del Hospital Quirónsalud Sur de Madrid Nuria Muñoz Jareño, señala que estos representan lo que se conoce como 'reflejos primitivos' del recién nacido, "la forma más primitiva de movimiento" y muchos de ellos servirán de base para actividades instintivas futuras.

   Quizás, el talento más llamativo de los recién nacidos sea el reflejo de la marcha, el dar pasos. "El bebé no es capaz de soportar su propio peso, por supuesto, pero sí lo sostiene de sus brazos (teniendo cuidado de sostener también su cabeza), y permitiendo que la planta de sus pies toquen una superficie plana, él colocará un pie frente al otro y 'caminará'. Este reflejo desaparecerá después de dos meses, luego al final del primer año, vuelve a ocurrir como el comportamiento voluntario aprendido de caminar", remarca la Academia Americana de Pediatría.

   En realidad, éste puede estar ausente hasta en un 20% de los recién nacidos normales, y suele desaparecer sobre los dos o tres meses de vida, o antes, sin que ello conlleve una significación patológica si es un fenómeno aislado, según advierte la neuropediatra por su parte.

OTROS 'TALENTOS' DEL BEBÉ: EL REFLEJO DE SUCCIÓN O EL DEL MORO

   Entre otros, la experta destaca también el reflejo de succión, aquel que tiene lugar por ejemplo si pones un dedo en la boca del recién nacido, y éste lo chupa; o por ejemplo el de los puntos cardinales, aquel que cuando palpas la región perilabial del recién nacido, éste busca el dedo responsable del tacto como si fuera un pezón.

   A su vez, incide en que en la exploración cervical se observaría el conocido como 'reflejo de Moro', que aparece en recién nacidos de manera involuntaria como respuesta a cuando el bebé siente que se está cayendo de espaldas, o en respuesta a un ruido fuerte e inesperado, cuando se asusta en definitiva o algo le sorprende. "Se cree que éste es el único miedo o temor en los seres humanos que no es aprendido", aprecia la especialista.

   Desde la Academia Americana de Pediatría añaden en este punto que este reflejo tiene lugar durante las primeras semanas de vida del bebé. "Si la cabeza de su bebé cambia de posición abruptamente o cae hacia atrás, o si algo fuerte o abrupto lo sorprende, reaccionará levantando sus brazos y piernas y extenderá su cuello, luego juntará sus brazos rápidamente y es posible que llore fuerte. El reflejo de Moro, que puede estar presente en diversos grados en diferentes bebés, llega a su punto máximo durante el primer mes y luego desaparece después de dos meses", añade.

   La entidad científica añade que otro reflejo cuando acaricie la palma de la mano de su bebé será que él agarre su dedo inmediatamente. O bien, acaricie la planta de su pie y vea que la flexiona a medida que dobla los dedos de sus pies con fuerza. "En los primeros días después del nacimiento, su bebé apretará tan fuerte que parecerá que puede sostener su propio peso, pero no lo intente. Él no tiene control de esta respuesta y posiblemente desaparezca de repente", agrega.

   Así, el recién nacido cuenta, entre otros, con los siguientes reflejos, según enumera la neuropediatra del Hospital Quirónsalud Sur de Madrid:

   .- Sinergia tónico-flexora de la mano o reflejo de agarrar: Se le estimula la palma de la mano con un dedo. El niño flexiona los dedos y lo agarra con gran fuerza. Desaparece sobre los 4 meses.

   .- Reflejo rotuliano: Al dar un golpe suave debajo de la rótula, la piernecita se estira de forma involuntaria.

   .- Reflejo tónico-asimétrico del cuello, también conocido como la 'posición de defensa': El niño debe estar en reposo, boca arriba. Cuando su bebé voltea su cabeza a un lado estira el brazo de ese lado, con el brazo opuesto doblado como si estuviera en posición de defensa. Sin embargo, no se sorprenda si no ve esta respuesta. Es sutil y posiblemente su bebé no la haga si está molesto o llora. Desaparece entre los 5 y los 7 meses.

   .-Reflejo de la prehensión plantar: El bebé flexiona los dedos del pie cuando se le estimula con un dedo en la base de los mismos.

   .- Reflejo del abanico o de extensión de los dedos: También se produce en el pie. Al estimular la planta, los dedos se extienden y separan. Desaparece en torno a los 9-12 meses.

   "La persistencia de algunos de ellos después de los 10-12 meses suele asociarse a trastornos motores objetivables en pruebas de neuroimagen y no, como hay quien pretende hacer creer, a trastornos frecuentes del niño como los trastornos del aprendizaje o la atención", según sentencia la doctora Muñoz Jareño.