MADRID, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El equipo de expertos de mediQuo ha analizado cuáles son los propósitos de año nuevo más habituales, como abandonar el tabaco o reducir el consumo de grasas y azúcares, y han explicado dónde residen las dificultades de cada uno de ellos y consejos para conseguirlos.
Sobre la reducción de ingesta de sustancias insanas, como azúcares y grasas, recuerdan que los alimentos procesados son los más dañinos en este sentido. "Un consumo excesivo de estos nutrientes está relacionado con la aparición de complicaciones como el sobrepeso, la diabetes o la hipertensión", recuerdan.
"Escoger alimentos con bajo nivel de lípidos y emplear trucos como eliminar toda la grasa visible de las carnes antes de cocinarlos, preparar los estofados con antelación y retirar la capa de grasa superior que aparece al enfriarse con una cuchara o espátula o emplear formas de cocción que no requieran aceite (plancha, grill, horno o papillote), para conservar el sabor de los alimentos, pero sin grasas innecesarias", recomienda Sonia Cibrián, especialista en Nutrición de mediQuo.
Respecto a los azúcares, Cibrián anima a eliminar aquellos alimentos ricos en calorías y sustituirlos por refrigerios más saludables. Asimismo, aconseja tomar de 2 a 3 piezas de fruta al día, aunque evitando aquellas con abundante contenido en azúcar (plátano, uva, higos o chirimoyas), o utilizar endulzantes alternativos como la miel o la canela, que "además tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas, antiinflamatorias y laxantes".
Sobre practicar ejercicio regularmente, resaltan que lo importante es pensar que el objetivo no es la pérdida de peso, sino incorporar el ejercicio físico dentro de la rutina vital para mantener saludable el cuerpo. Según el entrenador personal de mediQuo, David Peinado, es aconsejable iniciar los entrenamientos suavemente, con un periodo de adaptación de 30-45 días, a lo largo de los cuales se vaya aumentando progresivamente la intensidad de los ejercicios, durante 45 minutos o una hora diarias.
También apuestan por abandonar el hábito tabáquico. Para estos especialistas médicos, resulta "fundamental" ser conscientes de sus "importantes beneficios", como la disminución de la presión arterial y del ritmo cardíaco o la reducción del riesgo de padecer cáncer de pulmón, lengua o garganta.
Junto a esto, recomiendan rebajar el nivel de estrés. "El estilo de vida actual nos mantiene permanentemente activos y estresados. Si no somos capaces de gestionar esta situación, podemos acabar psicológicamente afectados y padecer enfermedades causadas de forma directa por el estrés (depresión, riesgo de infarto, hipertensión, contracturas o bruxismo). En primer lugar, es necesario detectar la acción perjudicial del estrés y tomar la determinación de modificar nuestros hábitos", indican.
"Seguir una dieta equilibrada y hacer deporte de forma habitual, evitar la cafeína, el alcohol, el tabaco y otros tóxicos, realizar técnicas de relajación como el yoga, dormir un número suficiente de horas, tratar de ser optimista y afrontar las situaciones con humor y buscar momentos para la serenidad y el disfrute personal", son algunos de los consejos que señala Judit Calpe, doctora de mediQuo.
Por último, aconsejan desconectar del móvil y "reconectar" con las personas. "Tenemos tiempo para todo y hay que aprovechar esos momentos con la familia y amigos aportando nuestro cien por cien, disfrutaremos más y conectaremos mejor con ellos. El móvil está siempre disponible pero, en cambio, estos encuentros entre seres queridos no siempre son posibles por disponibilidad, distancia, trabajo. Por lo tanto, desconectar para conectar es un buen comienzo para disfrutar de ellos y que ellos disfruten de nosotros", concluye la psicóloga Paula Rueda.