MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio de University of California Davis Health (Estados Unidos) ha evidenciado que los síntomas gastrointestinales comunes como la diarrea, el estreñimiento y la distensión abdominal están relacionados con problemas de sueño, autolesiones y dolencias físicas en niños en edad preescolar. Según el estudio, publicado en la revista 'Autism Research', estos síntomas gastrointestinales son mucho más comunes y potencialmente perturbadores en niños pequeños con autismo.
"Los médicos y los padres deben ser conscientes de la alta incidencia de problemas gastrointestinales en los niños con autismo. Este estudio destaca la relación entre los síntomas gastrointestinales y algunas conductas problemáticas que vemos en los niños en edad preescolar", explica la líder del estudio, Bibiana Restrepo.
Los padres de niños con trastornos del espectro autista (TEA) informan con frecuencia sobre problemas gastrointestinales. Por ello, estos investigadores evaluaron la presencia de síntomas gastrointestinales en niños de edad preescolar con y sin autismo.
El estudio incluyó 255 (184 hombres/71 mujeres) niños con TEA entre dos y tres años y medio de edad y 129 (75 hombres/54 mujeres) niños con un desarrollo típico en el mismo grupo de edad. Los pediatras especializados en autismo entrevistaron a los cuidadores durante la evaluación médica de los niños. Preguntaron a los padres con qué frecuencia sus hijos experimentaban síntomas gastrointestinales como dificultad para tragar, dolor abdominal, distensión abdominal, diarrea, estreñimiento, deposiciones dolorosas, vómitos, dificultad para tragar, sangre en las heces y sangre en el vómito.
Los investigadores agruparon a los niños en dos categorías: los que experimentaron uno o más síntomas gastrointestinales y los que nunca o rara vez tuvieron síntomas gastrointestinales en los últimos tres meses. Compararon a los niños de los dos grupos en cuanto a medidas de desarrollo, comportamiento y adaptación.
El estudio encontró que los niños en edad preescolar con TEA eran 2,7 veces más propensos a experimentar síntomas gastrointestinales que sus compañeros de desarrollo típico. De hecho, casi el 50 por ciento de los niños con TEA reportaron síntomas gastrointestinales frecuentes, en comparación con el 18 por ciento de los niños con desarrollo típico. Alrededor del 30 por ciento de los niños con TEA experimentaron múltiples síntomas gastrointestinales.
Los múltiples síntomas gastrointestinales se asociaron con mayores problemas con el sueño y la atención, así como con conductas problemáticas relacionadas con el daño autoinfligido, la agresión y la conducta restringida o repetitiva tanto en niños autistas como en los de desarrollo típico. La gravedad de estos problemas era mayor en los niños con autismo.
"Las conductas problemáticas pueden ser una expresión de malestar gastrointestinal en niños en edad preescolar. Los síntomas gastrointestinales son a menudo tratables, por lo que es importante reconocer lo comunes que son en los niños con autismo. El tratamiento de sus síntomas gastrointestinales podría potencialmente proporcionar algún alivio a los niños y a sus padres", concluye otra de las autoras, Christine Wu Nordahl.