MADRID, 30 Sep. (EDIZIONES) -
Las personas parpadeamos unas 15 veces por minuto, según aclara la Academia Americana de Oftalmología. En cambio, si estamos empleando una pantalla sostiene que este número desciende a las 5 o 7 veces por minutos, por ello insiste en la importancia de ser conscientes y de parpadear al máximo nuestros ojos cuando estamos con pantallas.
"Parpadear es la forma que tiene el ojo para preservar la humedad que requiere en su superficie. Conciénciese de la necesidad de parpadear tanto como sea posible. Esto evita que se reseque la superficie del ojo. Tal vez le ayude pegar una nota en la pantalla de su computadora para recordarle que debe parpadear con frecuencia", subraya la entidad científica.
En Infosalus entrevistamos a la doctora Iulia Pana, adjunta del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Puerta de Hierro (Majadahonda, Madrid), para entender un poco mejor la importancia de parpadear para la salud de nuestros ojos.
En primera instancia le preguntamos por la función de nuestros párpados, a lo que responde que estos tienen como misión principal la de proteger a los ojos contra los factores externos que puedan dañarlos, como por ejemplo la luz, las temperaturas extremas, o bien los cuerpos extraños.
"Al parpadear se realiza una distribución uniforme sobre la superficie ocular de la lágrima. También se remueven los restos celulares y las diferentes partículas externas que puedan entrar en contacto con el ojo. Este movimiento ayuda igualmente al drenaje de la lágrima a través de los puntos lagrimales hacia el conducto naso lagrimal", agrega la oftalmóloga.
En cuanto a las cifras sobre el número de veces que parpadeamos reconoce que la frecuencia normal del parpadeo se estima entre 5 y 26 veces por minuto, todo dependiendo principalmente de la actividad que estamos realizando. "De tal manera que es muy baja cuando estamos concentrando la atención visual, como durante la lectura, y mucho más alta durante una conversación", aclara.
UN ACTO REFLEJO
Otra de las curiosidades de parpadear es que, si te fijas, lo hacemos sin darnos cuenta. La doctora Iulia Pana, adjunta del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Puerta de Hierro, cuenta en este sentido que el parpadeo representa uno de los reflejos del organismo controlado por el sistema nervioso dependiendo de las necesidades de los ojos. "Como cualquier otra actividad motora, también se puede realizar de forma voluntaria y adaptar a distintas situaciones", subraya.
Ahora bien, esta especialista reconoce que la frecuencia del parpadeo se puede ver afectada por varias condiciones de la superficie ocular, como pueden ser la sequedad o la queratitis, también por enfermedades musculares como las distrofias miotónicas, o el blefarospasmo, y por enfermedades neurológicas.
"En la calidad y eficiencia del movimiento de los párpados pueden influir las afectaciones cutáneas de los párpados, los defectos estructurales como las cicatrices, pero también las tumoraciones", concluye la doctora Pana.
