Supone aproximadamente un tercio de la mortalidad debida por accidentes de tráfico
MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un estudio pionero realizado por investigadores de la Escuela Nacional del Instituto de Salud Carlos III ha revelado que el ozono troposférico es responsable de unas 500 muertes anuales en España, debidas en su mayoría a complicaciones circulatorias y respiratorias.
Los científicos han analizado el impacto atribuible del ozono troposférico en la mortalidad diaria en España, y ha desvelado además la posibilidad de determinar un nivel del umbral en el que el este podría afectar a la salud. Según la Unión Europea, cerca del 95 por ciento de la población europea respira concentraciones de ozones superiores a los valores establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En su artículo 'Short-term effect of tropospheric ozone on daily mortality in Spain', publicado en la revista 'Atmospheric Environment', analiza el impacto que tiene este contaminante sobre la mortalidad diaria, tanto por todas las causas como por causas circulatorias y respiratorias, de cada una de las 52 capitales de provincia españolas en el periodo 2000-2009.
Tal y como apunta Julio Díaz, jefe del Departamento de Epidemiología y Bioestadística de la Escuela Nacional de Sanidad, esta mortalidad atribuible al ozono, si bien es menor que la debida a las PM o al NO2, supone aproximadamente un tercio de la mortalidad debida a los accidentes de tráfico en España, "lo que evidencia la necesidad de arbitrar las medidas necesaria para disminuir las concentraciones de este contaminante".
El ozono es un contaminante secundario que se forma a partir de los óxidos de nitrógeno (NOx) y los compuestos orgánicos volátiles (COV) emitidos, fundamentalmente, por los vehículos. "A diferencia de lo que ocurre con las partículas materiales o los NOx, la relación entre la mortalidad diaria y las concentraciones medias diarias de ozono no es lineal, si no que presenta una forma cuadrática en forma de 'U' en 33 de las 46 ciudades en las que hay datos disponibles de ozono en el periodo de análisis", indican los investigadores.
Para Cristina Linares, científica titular de la Escuela Nacional de Sanidad, esta relación en forma de 'U' entre el ozono y la mortalidad diaria, que varía de una ciudad a otra, tiene "importantes implicaciones en salud, ya que permite establecer un nivel umbral a partir del cual el ozono comienza a afectar a la salud, y sería a partir de este valor cuando habría que tomar las medidas oportunas para proteger la salud de los ciudadanos dependiendo de las características de cada lugar".