MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación no ha encontrado un mayor riesgo de malformaciones congénitas asociadas con el tratamiento con radioterapia o quimioterapia en niños de padres que fueron tratados de un cáncer testicular.
El estudio, realizado por Yahia Al-Jebari, de la Universidad de Lund, Suecia, y sus colegas, siguió a 4.207 niños de 2.380 padres y encontró que los hijos concebidos después del tratamiento no estaban en mayor riesgo de malformaciones congénitas que los concebidos anteriormente.
Se ha demostrado que la radioterapia y la quimioterapia causan mutaciones y daños genéticos en los espermatozoides de animales y humanos, y existe la preocupación de que los hombres tratados con esas terapias puedan tener una mayor probabilidad de tener hijos con enfermedades genéticas o defectos de nacimiento. Debido a que el cáncer testicular afecta a los hombres más jóvenes, el equipo pudo comparar a los niños concebidos antes y después de que sus padres recibieran tratamiento.
Los datos del estudio, publicados en la revista 'PLOS Medicine', fueron de registros nacionales de nacimientos suecos, con 2 millones de individuos nacidos entre 1994 y 2014. Las limitaciones fueron la falta de datos sobre esperma congelado o de donantes, y solo un número limitado de pacientes fueron tratados con radioterapia y dosis altas de quimioterapia. Sin embargo, incluso para esos niños, no se detectó un mayor riesgo.
La investigación sugiere un riesgo ligeramente mayor asociado con el cáncer testicular de los padres, independientemente del tratamiento, pero ese aumento fue pequeño, de 3,5 a 4,4 niños por cada 100 nacidos, que no se considera que debiera ser una preocupación para los pacientes.
La autora principal, Yahia Al-Jebari, explica: "Nuestra investigación se propuso investigar si el tratamiento para el cáncer más común entre los hombres jóvenes conlleva un mayor riesgo de ser padre de un hijo con un defecto de nacimiento y no observamos un mayor riesgo asociado con las terapias contra el cáncer. Vimos un riesgo ligeramente mayor pero era muy pequeño y no estaba asociado con el tratamiento dado. Los pacientes deben estar tranquilos de que esto no es motivo de preocupación", concluye.