MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los niños infectados con la variante ómicron permanecieron infecciosos durante una media de tres días tras dar positivo en las pruebas del virus, según un estudio del Centro Schaeffer de Política y Economía Sanitarias de la USC y la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, publicado en la revista 'JAMA Pediatrics'.
"Básicamente estamos diciendo que cinco días es más que suficiente; los responsables de salud pública y educación pueden considerar duraciones más cortas" respecto al tiempo que los niños con el virus deben permanecer alejados de la aulas, afirma Neeraj Sood, coautor del estudio, director de la Iniciativa COVID-19 e investigador principal del Centro Schaeffer de la USC.
El estudio halló que el tiempo medio de infecciosidad era de tres días, con un 18,4% de niños infecciosos el quinto día y un 3,9% infecciosos el décimo día. El estudio tampoco halló ninguna relación entre el tiempo que los niños permanecían infecciosos y el hecho de que estuvieran vacunados, lo que sugiere que las políticas de regreso a la escuela quizá no necesiten discriminar por el estado de vacunación o de refuerzo.
El estudio pretende informar a los responsables políticos que se enfrentan a la cuestión de cuánto tiempo deben aislarse los niños cuando contraen COVID-19. Estas políticas de autoaislamiento, destinadas a detener la propagación del virus, pueden interrumpir negativamente la educación de los niños.
"Queremos proteger a los otros niños de la escuela que podrían infectarse, pero al mismo tiempo no queremos interrumpir la educación del niño infectado, dada la cantidad de interrupciones que ya se han producido --explica Sood, que también es profesor en la Escuela de Políticas Públicas Sol Price de la USC--. La duración de la infectividad es un parámetro importante para averiguar cuál debe ser la duración óptima del autoaislamiento".
Los investigadores se asociaron con una empresa de análisis de virus y examinaron hisopos nasales de 76 niños del condado de Los Ángeles que tenían entre 7 y 18 años y dieron positivo en COVID-19. Los participantes en la encuesta proporcionaron muestras durante cinco visitas domiciliarias a lo largo de un periodo de 10 días, y las muestras se examinaron en un laboratorio para encontrar evidencias de muerte celular, un signo de infectividad. Todos los participantes estaban infectados con la variante Omicron de COVID-19.
"Queríamos captar cómo cambiaba la infectividad a lo largo de 10 días", explica Nikhilesh Kumar, autor principal del estudio y estudiante de doctorado en la Facultad de Medicina Keck de la USC. También es coautor del estudio Eran Bendavid, médico especialista en enfermedades infecciosas y profesor asociado de Medicina en la Universidad de Stanford.
Los resultados concuerdan con investigaciones anteriores sobre adultos que contrajeron la variante ómicron, que no mostraron ninguna relación entre el estado de vacunación y el momento de la infecciosidad.
Esa investigación anterior, publicada en el 'New England Journal of Medicine', mostró que los adultos con ómicron se infectaron durante un periodo ligeramente más largo, con una mediana de tiempo de cinco días, señalaron los autores.
Sood pide más investigación para que los responsables políticos puedan considerar la posibilidad de ajustar el tiempo que los estudiantes deben permanecer fuera de las aulas.
"El virus seguirá mutando --recuerda Sood--. Tenemos que seguir haciendo estudios como éste porque la próxima variante puede tener una duración más larga o más corta de la infectividad".