MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
A menudo se cree que el hipnotismo solo funciona cuando un extraño místico balancea un reloj de bolsillo de un lado a otro, repitiendo la frase "Tienes sueño, mucho sueño", dándole un control absoluto sobre ti, pero no es así como funciona realmente y esto da lugar a muchos mitos dañinos sobre la hipnosis como que, por ejemplo, la persona hipnotizada no puede resistir las sugerencias cuando en realidad sí que puede.
Así lo ha desvelado un nuevo estudio de la Universidad de Binghamton (Estados Unidos) realizado por el profesor de psicología y experto en hipnosis, Steve Jay Lynn, que considera que la hipnosis tiene muchas aplicaciones clínicas útiles pero que los mitos impiden que se utilice en todo su potencial.
Por ello, en un artículo reciente publicado en 'BJPsych Advances' titulado 'Reconciliación de mitos y conceptos erróneos sobre la hipnosis con evidencia científica', él y sus colegas del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College, han abordado una serie de errores y conceptos erróneos sobre las características y la práctica de la hipnosis.
El primer mito más común en la cultura popular es la tendencia a creer que las personas hipnotizadas no pueden resistirse a las sugerencias, es decir, que muestran "obediencia ciega", aceptando automáticamente lo que sugiera el hipnotizador. Sin embargo, las personas no pierden el control de sus acciones durante la hipnosis.
De hecho, el hipnotizado se puede resistir e incluso oponerse a las sugestiones hipnóticas. Su experiencia de control durante la hipnosis depende de sus intenciones y expectativas con respecto a si retienen o no el control voluntario.
Otro mito es que la hipnosis es un "estado especial" donde los mecanismos de defensa se reducen y un "estado único de relajación física e inconsciencia consciente" pero esto no es del todo cierto. Las personas pueden responder a las sugestiones hipnóticas incluso cuando están alertas y en una bicicleta estática.
Además de ser una contradicción en los términos, la "inconsciencia consciente" es una descripción inexacta, porque durante la hipnosis, incluso las personas más sugestionables permanecen plenamente conscientes y conscientes de su entorno. Es más exacto considerar la hipnosis como un conjunto de procedimientos en los que se utilizan sugestiones verbales para modular la conciencia, la percepción y la cognición, en lugar de invocar innecesariamente "estados especiales".
La capacidad de respuesta de las personas a la hipnosis puede ser relativamente estable a lo largo del tiempo. Sin embargo, es incorrecto suponer que las personas son hipnotizables o no ya que estas varían mucho en su capacidad de respuesta y, a menudo, responden a algunas sugerencias pero no a otras. Aún así, la mayoría de las personas son lo suficientemente hipnotizables como para obtener beneficios sustanciales de las sugerencias terapéuticas.
Los comportamientos sugeridos durante la hipnosis pueden parecer tan alejados de lo mundano que inevitablemente surgen preguntas sobre si las respuestas hipnóticas son genuinas. Sin embargo, los estudios de neuroimágenes revelan que los efectos de las sugestiones hipnóticas activan regiones cerebrales como el procesamiento visual consistentes con eventos sugeridos como alucinaciones de un objeto.
Entre los mitos más arraigados también destaca el concepto de "hipnotizador" o hipnotizador parecido a un mago con poderes especiales de influencia que pueden "hipnotizar" a cualquiera como la única persona con esa "gran habilidad" para administrar los métodos hipnóticos.
Esta idea tan difundida es puro mito; en realidad, administrar una inducción hipnótica y sugerencias específicas no requiere ninguna habilidad o habilidad especial más allá de las requeridas para las interacciones sociales básicas y la administración de procedimientos experimentales o clínicos, como la capacidad de establecer una relación. Sin embargo, la hipnosis debe ser practicada únicamente por profesionales capacitados en el uso de la hipnosis.
Por último, los programas de televisión y las películas a menudo presentan a personas que pueden recordar recuerdos extremadamente precisos de una vida pasada distante bajo hipnosis. Pero la investigación sugiere una visión contraria.
Cuando los investigadores verifican la precisión de los recuerdos de personas que tienen una "regresión de edad" a un tiempo anterior con información fáctica del período sugerido, encuentran que la información es casi invariablemente incorrecta. Lo que la gente informa es mayormente consistente con la información que los experimentadores brindan con respecto a sus supuestas experiencias e identidades de vidas pasadas, por ejemplo, con diferente raza, cultura, sexo.
Estos hallazgos implican que el "recuerdo" refleja las expectativas, fantasías y creencias de los participantes con respecto a las características personales y los eventos durante un período histórico determinado.