MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
La miopía puede aumentar en los niños debido a un uso excesivo de los dispositivos digitales durante las vacaciones de verano, según ha advertido el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas (CGCOO), que ha recordado que este problema tiene una prevalencia actual del 30 al 40 por ciento en niños.
En este sentido, los ópticos-optometristas recomiendan a padres y madres acudir con sus hijos a un establecimiento sanitario de óptica al inicio del curso escolar con objeto de realizarles una revisión visual para identificar a tiempo cualquier problema ocular que pueda afectar negativamente al rendimiento académico.
El CGCOO ha subrayado que la miopía es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la epidemia del siglo XXI y preocupa especialmente su incidencia en niños y jóvenes.
"Se trata de la generación tecnológica, nacidos entre el año 2002 y 2021, habituados al uso de videoconsolas, ordenadores y móviles, y en una etapa de sus vidas en las que su sistema visual se está desarrollando", ha explicado el presidente del CGCOO, Juan Carlos Martínez.
Asimismo, la CGCOO ha señalado que la sobreexposición a las pantallas sin mantener una distancia mínima de seguridad está dando lugar a una progresión de la miopía más rápida en pacientes jóvenes. De hecho, es en el período estival cuando "los niños pasan más tiempo delante de las pantallas no solo por la gran cantidad de tiempo libre con el que cuentan, sino también por la imposibilidad de salir a la calle a determinadas horas debido a las altas temperaturas", ha matizado Martínez.
Algunos síntomas derivados de un uso prolongado de este tipo de dispositivos son visión borrosa, dificultad de enfoque de distancias, sensibilidad al brillo de la luz, incomodidad ocular, dolor de cabeza y ojos irritados, secos o cansados. Se trata de manifestaciones que afectan al rendimiento académico, un ámbito en el que también tienen especial incidencia las alteraciones de la visión no identificadas.
CONSEJOS PARA IDENTIFICAR PROBLEMAS VISUALES EN NIÑOS
Según ha destacado el CGCOO, la identificación temprana de un problema visual en el menor puede ser crucial, ya que, si no se trata, puede afectar a su habilidad para aprender y a su adaptación al colegio. Por este motivo, ha identificado una serie de síntomas que permiten sospechar de la existencia de algún problema visual.
Entre los problemas, el CGCOO ha advertido que un niño afectado por miopía suele sentarse demasiado cerca de la televisión o se aproxima mucho a los libros. Además, se pierde entre líneas cuando lee o usa el dedo para guiarse por el texto.
Asimismo, entorna los ojos o ladea la cabeza para ver mejor. También se frota los párpados con frecuencia y muestra una gran sensibilidad a la luz o lagrimeo excesivo.
RECOMENDACIONES Y ERGONOMÍA VISUAL
Otra de las consecuencias de una sobreexposición a las pantallas es la aparición de la fatiga visual, la cual se puede prevenir siguiendo algunos consejos.
Entre ellos, una iluminación adecuada y suficiente, evitando los reflejos en la pantalla. Además, se debe descansar 20 segundos cada 20 minutos mirando a 6 metros o más.
Los niños también deben relajar la vista mirando objetos o puntos alejados, por ejemplo, a través de la ventana, así como colocar la pantalla a una distancia mínima de 30 centímetros en el caso de móviles y tabletas.
Los expertos recomiendan acudir a revisión con el óptico-optometrista al menos una vez al año para prevenir problemas visuales y que pueda prescribir unas gafas en función del problema visual que exista y de los síntomas que se presenten.