Foto: FLICKR/MINISTERIO DE CULTURA ARGENTINA
av2" class="NormalTextoNoticia sumario bordersum">
MADRID, 14 Jul. (INFOSALUS) -
Estos defectos de la visión, junto con la vista cansada, están entre los más prevalentes entre la población. La miopía y la presbicia ya se corregían en la época del pintor pero no así el astigmatismo, un error de refracción que puede acompañar a la miopía, y que fue asociado al estilo de figuras alargadas de El Greco a inicios del siglo XX.
Según explica a Infosalus el doctor Enrique Santos Bueso, especialista de la Unidad de Neurooftalmología del Hospital Clínico Universitario San Carlos de la Comunidad de Madrid, un ojo es miope cuando la longitud del ojo es desproporcionada con respecto a la curvatura de la córnea o viceversa. Los rayos que entran en el ojo forman la imagen delante de la retina y por lo tanto la imagen se presenta borrosa.
Mucha gente tiene un astigmatismo tan leve que no afecta su visión
Los miopes ven mal los objetos lejanos y bien los cercanos, pues su punto de enfoque es más cercano que el de una persona de visión normal. "Para poder comprenderlo mejor, podemos hacer el símil del ojo con un balón de fútbol, en el que el ojo miope, sería un 'balón de baloncesto'", explica Santos Bueso.
La miopía, generalmente, se desarrolla en la época escolar y se suele estabilizar hacia los 20 años. Hasta entonces puede desarrollarse muy rápidamente y requerir frecuentes cambios de graduación de las gafas o lentillas. Afecta por igual a los hombres y a las mujeres y hay una clara predisposición familiar. Gran parte de los pacientes con miopía o hipermetropía tienen algún grado de astigmatismo.
"Imaginemos la córnea como la mitad de un globo terráqueo. Si los 'meridianos' de ese globo terráqueo no son iguales a los "paralelos", el globo se deforma. Podemos también compararlo con un balón de rugby donde, a diferencia de un balón de fútbol, es más ovalado. Como consecuencia de la alteración de uno o ambos ejes de la córnea, se producen imágenes borrosas", señala Santos Bueso.
El astigmatismo es un problema común y mucha gente tiene un astigmatismo tan leve que no afecta su visión. A veces las personas que tienen astigmatismo entrecierran los ojos para poder enfocar mejor los objetos. Esto no daña la visión pero puede causar dolores de cabeza.
LA FUERZA DE LAS FALSAS TEORÍAS
Los pacientes con astigmatismo ven más o menos borroso en función del número de dioptrías que padezcan. "Es un mito pensar que el paciente astígmata ve las imágenes deformadas y alargadas por la presencia del astigmatismo en un eje determinado (el balón de rugby en una u otra disposición)", señala el especialista.
A principios del siglo XX se desarrolló esta teoría por el doctor Germán Beritens que insistía en que El Greco pintaba así debido al astigmatismo que podría padecer. La teoría del astigmatismo como causa del estilo pictórico del pintor cretense fue refutada y desestimada por numerosos oftalmólogos en el primer cuarto del siglo pasado.
El profesor Manuel Márquez, catedrático de Oftalmología de la Universidad de Madrid, escribió varios artículos, hasta el año 1929, en los que desestima esta teoría basándose en los estudios de óptica. Sin embargo a pesar de la refutación de esta teoría, ha seguido manteniéndose en el acervo popular la teoría del astigmatismo como causa del estilo artístico de El Greco.
En los tiempos de El Greco no se corregía el astigmatismo pues aún no se conocía con la evidencia y exactitud actuales. "Se corregían defectos esféricos como la miopía o la vista cansada, como lo atestiguan los cuadros pintados por El Greco como 'El retrato del Cardenal Fernando Niño de Guevara' situado en el Museo Metropolitano de Nueva York y en el que aparece con unas gafas sujetas a las orejas con una cinta, pues aún no se habían descubierto las patillas actuales", concluye Santos Bueso.