MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Las personas tienen más probabilidades de optar por bebidas no alcohólicas si hay más de ellas disponibles que de bebidas alcohólicas, según un estudio publicado en la revista de acceso abierto 'BMC Public Health'.
Un equipo de investigadores del NIHR Bristol Biomedical Research Center y las Universidades de Bristol y Cambridge, en Reino Unido, descubrieron que cuando se les presentaban ocho opciones de bebidas, encontraron que cuando se les presentaron ocho opciones de bebida, los participantes tenían un 48% más de probabilidades de elegir una bebida no alcohólica cuando la proporción de opciones de bebida no alcohólica aumentaba de cuatro (50%) a seis (75%).
Cuando la proporción de opciones de bebidas no alcohólicas disminuyó de cuatro a dos (25%), los participantes fueron 46% menos propensos a elegir una bebida no alcohólica.
La doctora Anna Blackwell, autora correspondiente del estudio, recuerda que "el consumo de alcohol se encuentra entre los cinco principales factores de riesgo de enfermedad a nivel mundial. Investigaciones anteriores han demostrado que aumentar la disponibilidad de opciones de alimentos más saludables puede aumentar su selección y consumo en relación con alimentos menos saludables. Que sepamos, este es el primer estudio que demuestra que aumentar la disponibilidad de bebidas no alcohólicas, en relación con las bebidas alcohólicas en un escenario en línea, puede aumentar su selección".
Los participantes en el estudio completaron una tarea en línea en la que se les presentó una selección de cerveza alcohólica, cerveza no alcohólica y refrescos. Las selecciones de bebidas incluyeron cuatro bebidas alcohólicas y cuatro no alcohólicas, seis bebidas alcohólicas y dos bebidas no alcohólicas o dos bebidas alcohólicas y seis bebidas no alcohólicas. Participaron en el estudio 808 residentes del Reino Unido con una edad promedio de 38 años, que consumían alcohol regularmente.
Cuando se les presentaron bebidas en su mayoría sin alcohol, el 49% de los participantes seleccionó una bebida sin alcohol, en comparación con el 26% de los participantes que seleccionaron una bebida sin alcohol cuando se presentó con bebidas en su mayoría alcohólicas.
Estos resultados fueron consistentes independientemente del tiempo que los participantes tuvieron para tomar su decisión, lo que indica que los hallazgos no dependían de la cantidad de tiempo y atención que los participantes pudieron dedicar a su elección de bebida.
Los hallazgos sugieren que las intervenciones para fomentar opciones más saludables de alimentos y bebidas pueden ser más efectivas cuando se cambia la disponibilidad relativa de opciones más saludables y menos saludables.
"Muchos lugares ya ofrecen varias opciones sin alcohol, pero a menudo se almacenan fuera de la vista directa, por ejemplo, en refrigeradores de bajo nivel de la barra. Nuestros resultados indican que hacer que estos productos no alcohólicos sean más visibles para los clientes puede influir en ellos para que tomen decisiones más saludables", sugiere Anna Blackwell.
"El mercado de alternativas sin alcohol de cerveza, vino y bebidas espirituosas es pequeño, pero el crecimiento y la mejora de la selección y promoción de bebidas no alcohólicas de esta manera podrían brindar una oportunidad a los lugares autorizados para reducir el consumo de alcohol perdiendo ingresos", añade.