MADRID 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de 17 hospitales españoles han validado una metodología para calcular el riesgo exacto de desarrollar dolor crónico tras una cirugía, la cual, además, ha sido galardonada con 4.000 euros en la XXI edición del 'Premio a la Investigación en Dolor', promovido por la Cátedra Extraordinaria del Dolor de la Fundación Grünenthal-Universidad de Salamanca.
"Este trabajo ha consistido en la validación científica de un 'score' (una metodología para evaluar la situación de un paciente) que el grupo publicó inicialmente en 2015 y que denominaron 'Gendolcalt'", ha explicado el jefe de la Unidad del Dolor Hospital del Mar de Barcelona y autor principal del estudio, Antonio Montes.
Este 'score' permite determinar antes de la cirugía, el riesgo exacto de un paciente para desarrollar dolor crónico postquirúrgico. "La validación la hemos realizado en más de 1.000 pacientes de 17 hospitales, 10 que ya participaron en el primer estudio y siete que se han incorporado para este", ha explicado Montes.
En concreto, la aplicación del 'score' tiene varias líneas de actuación como, por ejemplo, informar al paciente y también a los equipos quirúrgicos del riesgo de desarrollar dolor crónico postquirúrgico; evitar o posponer una cirugía cuando esta no es imprescindible, por ejemplo en herniorrafia inguinal; aplicar medidas para intentar disminuir este riesgo si hay que realizar una cirugía; y realizar un seguimiento más específico de estos pacientes en el postoperatorio, con el fin de obtener un adecuado control del dolor y detectar signos de alarma, como dolor intenso y mantenido o dolor de características neuropáticas.
"En el primer estudio realizado por nuestro grupo, vimos que un 25% de los pacientes con dolor crónico postquirúrgico tomaban analgésicos por este motivo después de cuatro meses de haber sido intervenidos, y además referían una limitación moderada o intensa para realizar las actividades de la vida diaria", ha detallado Montes, quien ha incidido en que en el caso de los pacientes intervenidos por hernia inguinal, un dos por ciento de los mismos no se habían podido reincorporar a su trabajo por el dolor tras dos años de la cirugía.
Ahora bien, el modelo defendido por su grupo está constituido por seis variables preoperatorias: el tipo de cirugía, la edad, el dolor preoperatorio moderado o intenso en la zona de la intervención, el dolor preoperatorio moderado o intenso en otras partes del cuerpo, y los componentes físico y mental del cuestionario de calidad de vida SF-12.