Incontinencia urinaria masculina, una realidad más frecuente de la que pensamos

Archivo - La incontinencia urinaria en el hombre.
Archivo - La incontinencia urinaria en el hombre. - IRKIEV/ INSTOCK - Archivo
Publicado: martes, 7 noviembre 2023 8:28

   MADRID, 7 Nov. (EDIZIONES) -

   La incontinencia urinaria (IU) ha sido históricamente minusvalorada a pesar de ser un problema médico y sociosanitario de primer orden, y que afecta a más de 200 millones de pacientes. De hecho, la OMS no la ha reconocido como enfermedad hasta el año 1998.

   También se la conoce como la 'enfermedad silenciosa', según afirma en una entrevista con Infosalus el doctor Luis Resel, que es el coordinador del Grupo Nacional de Urología Funcional, Femenina y Urodinámica de la Asociación Española de Urología (AEU).

   "No hay datos fiables sobre su prevalencia porque es una enfermedad infradiagnosticada por varias razones: las equivocadas connotaciones negativas sociales y personales del paciente que le impiden acudir al médico (hasta un 40% no acuden a la consulta); y la escasa concienciación de los profesionales sanitarios, que apenas preguntan por este problema".

   Entre sus posibles causas, este urólogo mantiene que dependen de los diferentes tipos de incontinencia:

- Si es una incontinencia de esfuerzo: El problema es anatómico y se debe un déficit del esfínter uretral, o por una hipermovilidad de la uretra (generalmente producido por una debilidad de la musculatura del suelo pélvico), que impide el correcto funcionamiento del esfínter.

   - Si es por una incontinencia por urgencia: El problema es funcional y radica en la vejiga; se producen contracciones involuntarias de la vejiga que conducen a la fuga de orina; se denomina 'vejiga hiperactiva' y puede ser de causa desconocida (que es lo más habitual).

PRINCIPALES SÍNTOMAS DE ALARMA

   A su vez, preguntamos al doctor Resel por sus principales síntomas de alarma, a lo que él responde que cualquier grado de incontinencia urinaria o de urgencia miccional significativa deben ser evaluado por un especialista en Urología.

   "Recientemente se ha publicado que la incontinencia en Europa afecta a 55-60 millones de personas, y que implica el mayor gasto sanitario con diferencia, cercano a los 40 billones de euros. Se ha demostrado que cualquiera de las opciones terapéuticas disponibles para el manejo de esta enfermedad presenta una mejor relación coste-eficacia que no tratarla (uso de material absorbente)", advierte este especialista.

   Tanto en el hombre como en la mujer dice hay tres tipos de incontinencia urinaria:

   - Incontinencia urinaria de esfuerzo: Es la más frecuente en las mujeres y se caracteriza por la pérdida de orina en relación con los esfuerzos.

   - Incontinencia urinaria por urgencia: Es la más frecuente en los varones en relación con la patología prostática, y es debida a la pérdida de orina por contracciones involuntarias de la vejiga que se traducen en una urgencia imperiosa que es difícil de controlar.

   - Incontinencia urinaria mixta: Cuando se dan los dos tipos de incontinencia de esfuerzo y de urgencia.

   "La causa más frecuente de incontinencia urinaria de esfuerzo en el varón está relacionada con la cirugía de la patología prostática como la prostatectomía radical, resección transuretral, o la enucleación con láser", subraya el coordinador del Grupo Nacional de Urología Funcional, Femenina y Urodinámica de la Asociación Española de Urología.

¿Qué pueden hacer los hombres en este sentido para resolver la incontinencia urinaria? Mantiene este doctor que lo primero que hay que hacer es acudir al urólogo para que se realice un adecuado estudio diagnóstico, y se pueda aplicar un tratamiento personalizado que será diferente dependiendo del tipo de incontinencia:

   - Incontinencia urinaria por urgencia: Está relacionado con la patología prostática en relación con la obstrucción del tracto urinario; se suelen emplear diferentes fármacos para tal fin como los alfabloqueantes, los anticolinérgicos, los inhibidores de la 5 alfa reductasa/fosfodiesterasa, o la fitoterapia (extractos de plantas naturales), etc.; en el caso de que no sea eficaz el tratamiento conservador se pasaría al manejo especializado que se basa en las diferentes técnicas quirúrgicas como la enucleación con láser, la resección transuretral, la adenomectomía y otras nuevas tecnologías (vaporización, Rezum, embolización, implantes, etc).

   - Incontinencia de esfuerzo: Aparece como una complicación de la cirugía prostática y tiene un manejo conservador en un principio basado en la rehabilitación del suelo pélvico; si el este tratamiento no es eficaz, se pasa al tratamiento quirúrgico, basado en mallas suburetrales ajustables o no, y en los esfínteres uretrales artificiales (se suelen utilizar en incontinencias severas o cuando fracasa la cirugía con mallas).

   A su vez, el doctor Luis Resel incide en la idea de que la IU es una enfermedad con unas "implicaciones nefastas" para la calidad de vida de las personas que la padecen, ya que afecta a cualquier faceta de la actividad cotidiana, laboral, social, o familiar etc.

   "Puede ser causa de depresión, de aislamiento social, de pérdida de la eficacia en el trabajo incluyendo la baja laboral, y el ingreso en residencias. Es muy importante saber reconocer que es un problema que puede ser evaluado por un profesional y que tiene tratamientos eficaces", concluye el miembro de la AEU.