BARCELONA 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Vall d'Hebron Instituto de Investigación (VHIR) ha descubierto que las células residentes de memoria (TRM, por sus siglas en inglés) pueden ser uno de los mayores reservorios del VIH, ya que son las células más abundantes en los tejidos periféricos, como la piel o el tracto gastrointestinal, y están presentes en el tejido adiposo, los tejidos linfáticos y los órganos.
Las TRM juegan un doble papel: son la principal diana para el virus del VIH y representan un reservorio viral en tejidos como el cérvix, ha informado este lunes el VHIR en un comunicado.
Uno de los principales obstáculos para la erradicación del virus del VIH son los reservorios que almacenan el virus en un estado de latencia, o con bajos niveles de replicación, mientras los pacientes están en tratamiento antirretroviral.
El estudio, en el que colaboran el Hospital Germans Trias i Pujol, el del Mar y el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa y se ha publicado en 'Nature Communications', señala que uno de los principales obstáculos para la erradicación del virus del VIH son los reservorios que almacenan el virus en un estado de latencia o con bajos niveles de replicación.
Las características de los reservorios y de los virus que emergen cuando se interrumpe el tratamiento sugieren que los reservorios se establecen en diferentes tejidos pocos días después de infectarse, incluyendo las mucosas por donde se transmite el virus.
El objetivo del estudio ha sido comprobar si las TRM podían ser un reservorio del VIH, lo que las convertiría en uno de los mayores reservorios del virus ya que son las células más abundantes en tejidos.
"En el torrente sanguíneo solo encontramos un 2% de los linfocitos T CD4+ que son la principal diana del virus VIH. Por tanto, el gran volumen de T CD4+ está en los tejidos y es allí donde debemos buscar los reservorios", ha remarcado la investigadora Meritxell Genesc, y la investigación quiere profundizar en el estudio del tejido cervical como posible reservorio.
CÉLULAS RESIDENTES DE MEMORIA
Empleando explantes cervicales infectados ex vivo, el grupo de investigación llegó a la conclusión de que las células residentes de memoria representan una diana preferencial para el virus, y compararon también tejido cervical de mujeres sanas como el de las que está en tratamiento con antirretrovirales.
Los investigadores concluyeron que en los tejidos de la mucosa cervical hay un "nivel significativamente más alto de virus remanente" que en la sangre y que la mayoría de las células que tienen ese virus son las TRM, ha explica la investigadora María José Buzón.
Una de las características de las TRM es la expresión del marcador CD69 y "se abre una vía para una mejor identificación de los reservorios del VIH en los tejidos y es a través de este marcador, que se comporta de manera diferente en sangre que en tejidos".
En sangre, CD69 significa un estado de activación celular y, por este motivo, hasta ahora no se estudiaba ya que en los reservorios lo que se busca son células en estado de reposo, y en cambio, en tejido, se convierte en un marcador de residencia, es decir, que las células permanecen en los tejidos.