MADRID, 30 Oct. (EDIZIONES) -
La enuresis, coloquialmente conocida como mojar la cama, son escapes de orina que suceden mientras el niño está durmiendo a una edad en la que se espera que esto ya no pase. El control de la vejiga se consigue, habitualmente, entre los dos y los cuatro años. En este contexto, que esto pase se considera, en general, normal hasta los cinco años.
Es un trastorno muy frecuente. Según especifica la secretaria general de la Asociación Española de Pediatría (AEP), la doctora María García Onieva, uno de cada seis niños de cinco años moja la cama al menos dos veces por semana; también lo hace uno de cada diez de siete años; uno de cada 14 de diez años y entre uno y tres de cada 100 adultos.
Aunque las causas de la enuresis son desconocidas, la doctora García detalla que se ha relacionado con varios factores. En primer lugar, la experta de AEP destaca la herencia genética, ya que "muchas veces algún familiar lo ha tenido". Además, también se ha relacionado con el sexo. "Es más frecuente en los niños que en las niñas", desvela la doctora García.
Por otra parte, mojar la cama también se ha relacionado con una "mayor producción de orina por varios motivos, entre ellos beber mucho antes de acostarse o durante la noche", además de "no ser capaces de despertarse para orinar", continúa la experta.
También puede suceder por sufrir estreñimiento crónico. La razón es que el intestino "lleno de heces" presiona la vejiga. Por último, también pueden enumerarse diversos problemas psicológicos con posible relación con la enuresis. La doctora García destaca "estrés, conflictos familiares o escolares o celos por el nacimiento de un hermano".
En este contexto, la experta de AEP indica que hay varias acciones que los padres que se encuentren en esta situación con sus hijos pueden llevar a cabo. El primer consejo es que "no se debe reñir ni castigar al niño que moja la cama", avisa la doctora García. "No lo hace porque quiera. Probablemente a él también le molesta, aunque no lo diga", insiste la pediatra.
Al niño que moja la cama "se le puede ayudar con estas medidas", prosigue la especialista, que recalca que hay que "evitar que se sienta culpable, pues les ocurre a muchos niños". Además, la doctor García indica que una regla familiar ha de ser "no burlarse del niño" puesto que "su autoestima está en juego".
Por otra parte, también puede ser de utilidad "vigilar que orine antes de acostarse y que no beba líquidos antes de dormir o por la noche", aconseja la experta, que agrega que "las bebidas con cafeína se deben evitar siempre".
SIN PAÑAL, UN CALENDARIO Y NO LEVANTARLE POR LA NOCHE
"Para iniciar el control de la enuresis se debe retirar el pañal para dormir. Puede usarse un protector del colchón bajo la sábana o, más cómodo, absorbentes con o sin alas sobre ella", recomienda la doctora García, que agrega que puede dejarse al niño ayudar o que cambie solo la ropa mojada. "Pero que no lo vea como castigo", avisa la miembro de AEP.
Otra cosa que puede hacerse es motivar al niño "con un calendario de noches secas y mojadas, mediante dibujos o pegativas y premiarlo cuando consiga el objetivo, pero también si realmente pone de su parte para conseguirlo: no bebe y orina antes de acostarse o ayuda a recoger la ropa mojada", según la experta. No obstante, "si se ve que no mejora, no insistir con el calendario porque le frustrará", alerta la doctora, que agrega que también es beneficioso mostrar al niño satisfacción con mínimos avances.
Por último, la doctora García recuerda que levantar al niño por la noche para que orine "hará que no moje la cama, pero no resuelve la enuresis. El niño suele estar dormido y no se cuenta de lo que hace".
Además, "retener la orina durante unos minutos cuando siente ganas de hacer pis no es perjudicial, pero no ha demostrado ser eficaz, ni tampoco es conveniente indicarle que interrumpa la orina cuando esté orinando, pues hasta puede resultar contraproducente dado que puede alterar la función de la vejiga", comenta la experta.
TRATAMIENTO DE LA ENURESIS
Además de estos consejos, hay dos tratamientos que pueden solucionar o controlar la enuresis: terapia con alarma de enuresis y tratamiento con desmopresina. En cuanto a la alarma, consiste en "un dispositivo que emite sonido, luz o vibración con las primeras gotas de orina", explica la miembro de AEP, que valora este tratamiento como el "más eficaz" porque "enseña al niño a responder a las sensaciones de la vejiga". Además, "exige motivación, esfuerzo y colaboración del niño y familia", completa la doctora García.
La desmopresina, por su parte, "es un medicamento que disminuye la producción de orina por la noche. Es ideal para los campamentos o situaciones esporádicas y una alternativa a la alarma cuando no está indicada o no puede utilizarse", apunta la experta.
No obstante, este conlleva "frecuentes recaídas al suspenderlo", según la doctora García, y "tiene riesgos de intoxicación si bebe líquidos, por lo que debe evitarlos desde una hora antes hasta ocho horas después de su toma". "Síntomas como vómitos, diarrea, dolor de cabeza o adormecimiento recomiendan dejar el tratamiento y consultar", completa la pediatra.
"Los dos tratamientos requieren constancia y supervisión por un profesional. Habitualmente se necesitan varios meses para solucionar la enuresis. Puede haber recaídas que aconsejen nuevos ciclos o cambios de tratamiento", concluye la doctora García.