Hallan niveles "sorprendentes" de síntomas de salud mental ocultos entre las personas con enfermedades autoinmunes

Publicado: miércoles, 26 julio 2023 9:20

MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

Más de la mitad de los pacientes con enfermedades autoinmunes padecen trastornos mentales como depresión o ansiedad, pero a la mayoría de ellos rara vez o nunca se les pregunta en la clínica sobre los síntomas de salud mental, según una nueva investigación de la Universidad de Cambridge y el King's College de Londres (Reino Unido), publicada en la revista 'Rheumatology'.

Los investigadores descubrieron que más de la mitad de los pacientes rara vez o nunca habían informado de sus síntomas de salud mental a un clínico, y que la gama de posibles síntomas de salud mental y neurológicos es mucho más amplia de lo que se había informado anteriormente.

El equipo estudió los síntomas neurológicos y psiquiátricos de 1.853 pacientes con enfermedades reumáticas autoinmunes sistémicas (ERAS), como lupus y artritis reumatoide. Los investigadores también encuestaron a 289 médicos, en su mayoría reumatólogos, psiquiatras y neurólogos, y realizaron 113 entrevistas a pacientes y médicos.

Los 30 síntomas sobre los que preguntó el equipo incluían fatiga, alucinaciones, ansiedad y depresión. Entre los pacientes del estudio, la experiencia de la mayoría de estos síntomas estaba muy extendida.

Por ejemplo, el 55% de los pacientes con ERAS sufría depresión, el 57% ansiedad, el 89% fatiga grave y el 70% disfunción cognitiva. La prevalencia global de los síntomas era significativamente mayor de lo que se pensaba, y mucho mayor que en un grupo de control de voluntarios sanos.

Los síntomas de salud mental descritos por los pacientes contrastaban fuertemente con las estimaciones de los médicos. Por ejemplo, el número de pacientes con lupus que declararon tener pensamientos suicidas fue tres veces superior al estimado por los médicos (47% frente a 15%). Los médicos se mostraron a menudo sorprendidos y preocupados por la frecuencia y la amplia gama de síntomas que los pacientes comunicaron a los investigadores.

Algunos clínicos se centraban mucho más en los síntomas articulares que en los mentales, ya que sostenían la opinión de que las enfermedades reumáticas autoinmunes sistémicas no suelen afectar al cerebro.

Sin embargo, otros clínicos consideraban que estos síntomas estaban infravalorados porque rara vez se preguntaba a los pacientes por ellos en la consulta. Una enfermera de reumatología entrevistada apunta que "los médicos no van a buscar las alucinaciones, así que si no preguntamos no creemos que existan mucho".

El estudio detectó desacuerdos entre clínicos especializados en distintos aspectos de la atención, pero muy pocos hospitales contaban con sistemas eficaces en los que reumatólogos, neurólogos y psiquiatras trabajaran juntos.

El doctor Tom Pollak, del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College de Londres, afirma que el estudio subraya la importancia de que todos los médicos pregunten a sus pacientes por su salud mental.

"Sabemos desde hace tiempo que padecer una enfermedad autoinmune sistémica puede afectar negativamente a la salud mental, pero este estudio ofrece una imagen sorprendente de la amplitud y el impacto de estos síntomas --señala--. Todas las personas que trabajan en la atención sanitaria con estos pacientes deberían preguntarles sistemáticamente por su bienestar mental, y los pacientes deberían recibir apoyo para hablar sin miedo a ser juzgados. Ningún paciente debe sufrir en silencio".

El estudio puso de manifiesto que los pacientes se mostraban a menudo reticentes a informar a los médicos de los problemas de salud mental que pudieran tener, a veces con la sensación de que podrían ser estigmatizados. Los pacientes afirmaron con frecuencia que, incluso cuando compartían sus síntomas de salud mental con los médicos, a menudo no se comentaban o no se documentaban con precisión o en absoluto.

Un paciente expresa cómo se sentía: "Me siento culpable e inútil, además de deprimido y muy enfermo. No me siento realmente apoyada, comprendida, escuchada, esperanzada en absoluto. Es horrible vivir así.... No hay esperanza".

La doctora Melanie Sloan, del Departamento de Salud Pública y Atención Primaria de la Universidad de Cambridge, afirma que "el bajo nivel de información detectado es muy preocupante, ya que los problemas de salud mental, fatiga y cognición pueden cambiar la vida y, en ocasiones, ponerla en peligro".

"Sólo implicando plenamente a los pacientes en su atención sanitaria y pidiéndoles su opinión podremos determinar el alcance de estos síntomas, a menudo ocultos, y ayudar a los pacientes a obtener la comprensión, el apoyo y el tratamiento que necesitan", añade.

El equipo de investigadores señala que, aunque los síntomas neurológicos y psiquiátricos no se mencionan lo suficiente en la clínica, no se identifican lo suficiente en la investigación y no están suficientemente representados en las directrices clínicas, casi todos los médicos están muy motivados para mejorar la atención.

La rápida evolución de los conocimientos --incluidas las repercusiones conductuales y cognitivas de la inflamación crónica y una gama cada vez más amplia de posibles biomarcadores-- significa que hay motivos para el optimismo.

Sarah Campbell, Directora Ejecutiva de la Sociedad Británica de Reumatología, comenta que "este estudio pone de manifiesto la urgente necesidad de mejorar el acceso de los pacientes a un apoyo integrado en materia de salud mental".

"Teniendo en cuenta los resultados del estudio sobre la prevalencia de este problema y el profundo impacto que los síntomas neurológicos y psiquiátricos tienen en los pacientes, debería ser motivo de gran preocupación para los responsables políticos que sólo el 8% de los departamentos de reumatología en Inglaterra y Gales tengan un psicólogo integrado en su equipo --subraya--. Apoyamos plenamente la conclusión del equipo del estudio de que es necesaria una mayor colaboración interdisciplinar y entre pacientes y médicos para garantizar la equidad en el cuidado de la salud mental y física de los pacientes".

Por su parte, Lord Blunkett afirma que "es sorprendente y muy preocupante que casi la mitad de los pacientes con lupus hayan tenido pensamientos suicidas, y que los médicos subestimen en gran medida la carga que suponen estas enfermedades crónicas para la salud mental".