MADRID 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
Expertos de Cigna Healthcare España han aconsejado a las empresas que fomenten sesiones deportivas y planifiquen otras de meditación y relajación para facilitar la vuelta a la oficina después del verano y evitar que la incoporación impacte de forma grave en la salud física y mental de la plantilla.
De este modo, las empresas podrían programar sesiones de mindfulness por equipos, de 20-30 minutos y una o dos veces a la semana, lo que promueve la salud mental y fortalece la cohesión entre compañeros. Después, estas sesiones podrían espaciarse gradualmente a medida que los empleados se adapten nuevamente a su rutina.
Además, que faciliten sesiones regulares de actividad física, como yoga, pilates o clases de fitness, o que ofrezcan el acceso a gimnasios o clubes deportivos proporciona a los empleados oportunidades para desconectar, reducir el estrés y fomentar un estilo de vida saludable. Por tanto, tanto la salud física como mental se ven beneficiadas gracias a ello.
Llevar a cabo estas actividades puede ayudar a aquellas personas a las que les supone un reto regresar a la oficina después de las vacaciones o después de un largo periodo de teletrabajo, que muchas compañías implementan precisamente durante el periodo estival. A este respecto, la ergofobia es una de las complicaciones más limitantes que pueden experimentar los trabajadores. Esta se manifiesta en ataques de pánico, insomnio y una constante sensación de tensión, dolores de cabeza y problemas gastrointestinales.
Como consecuencia, este trastorno impacta en el rendimiento laboral, ya que las personas con ergofobia suelen faltar frecuentemente al trabajo buscando excusas para ausentarse, lo que afecta la continuidad y el cumplimiento de las tareas. Además, esta fobia en la que se tiende a evitar el entorno laboral y todo lo que ello conlleva, conduce al aislamiento social y a la soledad, lo que dificulta la interacción con los compañeros y afecta negativamente a la dinámica de equipo y la colaboración.
"La vuelta al entorno laboral no debe ser vista simplemente como un retorno a la normalidad, sino como una oportunidad para reimaginar cómo podemos hacer del espacio laboral un entorno más acogedor, flexible y que favorezca tanto la productividad como el bienestar personal", ha explicado la directora de Recursos Humanos de Cigna Healthcare España, Amira Bueno.
Por ello, los especialistas han recomendado también que las empresas aprovechen para potenciar espacios de trabajo más verdes, acogedores y relajantes. Este tipo de espacios integra elementos naturales dentro del entorno laboral, como plantas, luz natural, fuentes de agua, y materiales orgánicos creando un ambiente que imite la naturaleza y reduciendo la ansiedad asociada con la oficina. Estos diseños han demostrado reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y la concentración, y aumentar la productividad.
Para ayudar a los empleados a aclimatarse a la vuelta a la rutina, es importante ajustar los horarios en la medida de lo posible, tanto en remoto como presencial, de manera flexible. En este sentido, se debe evitar programar reuniones importantes el primer lunes después de las vacaciones y permitir pausas regulares a lo largo de la jornada.
Como bienvenida, también pueden organizar un evento de 'team building' u otro tipo de acción para hacer el regreso más agradable. Estas actividades refuerzan las relaciones entre compañeros, promueven la colaboración y ayudan a reducir la ansiedad asociada con la vuelta al trabajo. Pueden incluir desde actividades recreativas al aire libre, hasta talleres de desarrollo personal o dinámicas de grupo orientadas a mejorar la comunicación y la cohesión del equipo.
