Alertan de que el consumo de alcohol incluso antes de la concepción puede causar malformaciones, físicas así como problemas en el comportamiento y estabilidad emocional
MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la organización Sociodrogalcohol, psiquiatra y miembro de la Unidad de Conductas Adictivas del Hospital de San Pablo (Barcelona), el doctor José Guardia, advirtió hoy de que el consumo de alcohol durante el embarazo causa trastornos de comportamiento y problemas en el desarrollo de uno de cada mil recién nacidos.
Según explicó este experto en declaraciones a Europa Press, se calcula epidemiológicamente que aproximadamente uno de cada cien recién nacidos podrían presentar el síndrome de alcoholismo fetal (SAF), la alteración más grave como consecuencia del consumo de alcohol durante el embarazo. Sin embargo, este experto matizó que cada vez se habla más del llamado "espectro" del síndrome alcohólico fetal.
Se trata de una afectación debida a la exposición prenatal del alcohol, pero de menor gravedad, que se manifestaría con unos síntomas más sutiles, y ésta podría ser diez veces más frecuente que el síndrome más grave, de manera que podría afectar casi a uno de cada cien nacidos. "Esta prevalencia sería una cifra equivalente a la de otros trastornos mentales graves como la esquizofrenia o el trastorno bipolar", señaló
En cuanto a las consecuencias, explicó que tanto los niños que tienen SAF como la afectación más leve pueden presentar alteraciones en el comportamiento, en la capacidad de concentración, de aprendizaje y adaptación a la escuela parecida a la que pueden tener los niños que tienen trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), incluso las manifestaciones clínicas pueden ser las mismas.
En este sentido, indicó que ambos trastornos pueden confundirse, y advirtió de que a medida que se acercan a la adolescencia los problemas tienden a agravarse, de manera que pueden tener mayor vulnerabilidad hacia el desarrollo de otros trastornos psiquiátricos, entre los que se encuentra el abuso de alcohol y drogas.
"Son personas que además tienen dificultades en el razonamiento abstracto, y tienen dificultades en la comprensión de la complejidad de la relación social, son impulsivos, por lo que se pueden ver involucrados en actos delictivos, pueden acabar en prisión, y si no tienen la tutela de sus padres o institución que les guíe, el pronóstico de cara a cuando se hagan mayores se complica", alertó el psiquiatra.
CERO ALCOHOL DURANTE EL EMBARAZO, LA ÚNICA PREVENCIÓN
En cuanto al tratamiento, Guardia destacó que lo más efectivo es la prevención, ya que es necesario concienciar de que el consumo de bebidas alcohólicas ha de ser cero. "Este trastorno es una de las causas más frecuentes de retraso mental, pero es la única causa que podría evitarse completamente si las mujeres se pudieran mantener sin beber alcohol durante todo el embarazo, e incluso cuando están planificándolo, porque el alcohol ya puede tener un efecto tóxico o teratógeno en el momento de la concepción".
Por ello, el doctor considera esencial que los productos incluyan mensajes dirigidos a las embarazadas, acerca de las consecuencias negativas que tiene estas bebidas. "De la misma manera que en las cajetillas de tabaco hay una serie de advertencias, en las botellas que tienen contenido alcohólico por lo menos a las embarazadas habría que advertirles de que es un producto tóxico para el feto que puede producir malformaciones", subrayó.
"España está dando tímidos pasos en este sentido, respecto a la ley del menor en relación con el consumo de bebidas alcohólicas, --que en un momento determinado, cuando estaba a punto de llevarse al congreso, se retiró-- y habría sido un gran avance en cuanto a la protección de menores", destacó y añadió que "los poderes del estado tienen que proteger a los menores de edad respecto a los peligros, y el alcohol es uno de ellos".
25% ESPAÑOLAS BEBEN DURANTE EL EMBARAZO
Según advierte Sociodrogalcohol, numerosos estudios muestran que hay un porcentaje importante de mujeres en la UE que siguen bebiendo durante el embarazo y se estima que oscila entre un 25 por ciento en España y entre un 35 y un 50 por ciento en los Países Bajos, e incluso tasas más altas en el Reino Unido o Irlanda.
Entre las consecuencias físicas que el síndrome alcohólico fetal (SAF) puede tener en el desarrollo del feto, los expertos destacan que estos niños presentan unos rasgos característicos en la configuración de la cara, como hendiduras palpebrales cortas, labio superior delgado, desaparición del surco entre la nariz y el labio superior. Además, pueden presentar también malformaciones de otros órganos, como el corazón, o alteraciones en el desarrollo del cerebro.
Por otro lado, pueden tener dificultades en la coordinación de movimientos, capacidad de concentración, comportamientos hiperactivos e inestabilidad emocional y, respecto a los menores que sólo han tenido una leve afectación por el alcohol durante el embarazo, los expertos indican que pueden presentar alteraciones emocionales o del comportamiento y dificultades en la adaptación y aprendizaje.
Coincidiendo con el día mundial del síndrome, el próximo mes de septiembre se celebrará la conferencia 'El alcohol y el embarazo', en la que la organización estará representada este año por la jefa de laboratorio de Patología celular del Centro de Investigación Príncipe Felipe de Valencia, y que abordará cuestiones concretas acerca de los efectos del alcohol en el feto y embrión.