Por qué el estudio del cerebro debe ser una prioridad

Publicado: viernes, 1 diciembre 2023 17:17


MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del Consejo Europeo del Cerebro (EBC, por sus siglas en inglés), Suzanne Dickson, ha pedido "incrementar considerablemente el apoyo a la investigación y a la innovación" del cerebro, ya que "el estudio del cerebro tiene que convertirse en una prioridad que cuente con el compromiso pleno de la Unión Europea y los Estados miembros".

"No hay ninguna razón médica, científica, económica o social para explicar por qué hay tan pocos estudios sobre el cerebro y por qué el estudio del cerebro recibe una financiación limitada", ha señalado, en el marco de la Jornada 'Nuestro Cerebro, nuestro futuro', organizada conjuntamente con el Consejo Español del Cerebro y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que ha tenido lugar esta semana en el Senado.

En cuanto a enfermedades como el Alzheimer, Cristina Maragall, de la Fundación Pasqual Maragall, ha señalado que es "un momento crucial" en la investigación de la enfermedad de Alzheimer, a punto de encontrar medicamentos que modifiquen el curso de la enfermedad.

"Si en 2025 se encontrara un tratamiento para retrasar cinco años el comienzo del Alzheimer, en 2030 los afectados se reducirían en un 40 por ciento", ha expresado. Ese retraso de 3 o 5 años en el comienzo del Alzheimer evitaría también que las etapas más penosas, que se dan a edad avanzada, llegaran a desarrollarse.

El doctor José Obeso, director del Centro Integral de Neurociencias AC HM (CINAC), y uno de los investigadores más citados en la enfermedad de Parkinson, ha resaltado cómo los últimos abordajes de esta patología están permitiendo a los pacientes volver a caminar cuando ya la enfermedad se lo impedía, con el implante de electrodos en la médula espinal. Y también es posible en la actualidad la eliminación de los temblores de forma no invasiva mediante la aplicación focal de ultrasonidos de alta intensidad.

COMPROMISO E INVERSIÓN

El profesor Juan Lerma, vicepresidente del Consejo Europeo del Cerebro, ha matizado que "se ha avanzado", pero que "no hay una solución rápida". "No hay atajos. Necesitamos compromiso e inversión en investigación básica, clínica y traslacional, para tratar las enfermedades mentales", ha detallado.

Para ello, el profesor Lerma ha insistido en la necesidad de que todas las partes implicadas --investigadores, innovadores, clínicos, pacientes, la industria farmacéutica y otras organizaciones profesionales, así como los legisladores y los políticos-- "se sienten en la misma mesa".

Como vicepresidente del Consejo Europeo del Cerebro, Lerma ha destacado el "enorme" coste económico de las enfermedades que afectan al cerebro, que cifró en unos 800.000 millones de euros en un solo año, "el equivalente al dinero que la Unión Europea ha destinado para el plan de recuperación económica de la crisis del Covid-19 y de la guerra de Ucrania para todos los Estados miembros".

LA DIFICULTAD DE ESTUDIAR EL CEREBRO

Durante el encuentro, se ha puesto de manifiesto que la "gran complejidad" del cerebro es lo que hace que los estados de enfermedad que le afectan supongan una carga "demasiado grande" para las personas y sus familias. Y por esa misma razón, "el coste de la investigación sobre el cerebro es mucho mayor al de otras enfermedades", han señalado los expertos.

La presidenta del EBC, Suzanne Dickson, y el doctor José Luis Lanciego, presidente del Comité Paneuropeo de la Organización Internacional para la Investigación del Cerebro (PERC-IBRO), han enfatizado en la necesidad de la investigación básica, especialmente en animales, porque es crucial para avanzar en el estudio de las enfermedades del cerebro.

MEDICINA MOLECULAR DE PRECISIÓN

El profesor Lerma ha explicado que las enfermedades cerebrales que tienen un origen genético se pueden reproducir en ratones para generar un modelo de la enfermedad humana a nivel más simple. "Esto facilita el estudio de la fisiopatología de esas enfermedades y eventualmente descubrir las dianas terapéuticas que permitan modularla con fármacos. Y obviamente esto necesita muchísima investigación básica, muchísimo conocimiento de los fundamentos de cómo funciona el cerebro. Esta es una de las llamadas básicas que vamos a lanzar a lo largo de esta jornada: necesitamos conjunción de la neurociencia básica con la neurociencia clínica y con el desarrollo de fármacos", ha señalado.

La doctora Mara Parellada, coordinadora del programa de 'Atención médica integral de personas con trastornos del espectro del autismo' (AMITEA), ha incidido en la necesidad de avanzar hacia una "medicina muchísimo más precisa e intensiva, que tenga en cuenta la variabilidad entre los pacientes de una misma patología".

Para lograrlo, señala que es necesario recurrir al análisis computacional que permite analizar una elevada cantidad de datos recogidos de muchas personas, encontrar asociaciones que no se aprecian a simple vista y, "posteriormente establecer grupos de pacientes que tengan una mayor similitud a nivel neurobiológico y testar los tratamientos más allá del diagnóstico clínico, para trastornos como los del espectro del autismo, de igual forma que ya se hace en patologías como el cáncer", señala esta experta.

La presidenta del Consejo Español del Cerebro, Mara Dierssen, ha recordado que "las enfermedades cerebrales son crónicas, pero el sistema sanitario solo está preparado para afrontar patologías agudas". A esto se une el hecho de que la sociedad está envejeciendo, y por tanto las enfermedades neurodegenerativas asociadas a la edad irán en aumento y se unirán a otras patologías crónicas previas, lo que aumentará la carga del sistema sanitario.

Se estima que alrededor de mil millones de personas en todo el mundo viven con una afección neurológica y 970 millones más padecían algún problema de salud mental en 2019, siendo los trastornos de ansiedad y depresión los más frecuentes.

Para Francisco Colomer, de la Dirección General de Planificación de la Investigación, "el enorme reto del conocimiento del cerebro solo se puede resolver de manera global con una colaboración tanto a nivel de la Unión Europea, como a través del fortalecimiento de los lazos que tenemos con el resto del mundo". Además, ha pedido poner en marcha grandes infraestructuras de investigación de uso compartido.