MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
La contaminación atmosférica también se relaciona con la aparición de cáncer de garganta, de mama o del aparato digestivo, con diabetes tipo 2, ansiedad, demencia, Parkinson y Alzheimer, ha puesto de relevancia el jefe del departamento de Epidemiología y Bioestadística de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, el doctor Julio Díaz.
Así lo ha hecho durante una jornada informativa formativa sobre contaminación ambiental y salud organizada por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), en colaboración con la Asociación de Informadores de la Salud (ANIS) y la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA), cuyo objetivo ha sido "dar información científica y contrastada que demuestre el grave problema" que se enfrenta con la contaminación, según el presidente de SEPAR, el doctor Carlos A. Jiménez.
Los seis contaminantes más peligrosos para la salud son el nitrógeno, el ozono, las partículas en suspensión, el dióxido de azufre, el monóxido de carbono y el plomo.
En cuanto a las partículas en suspensión, "cuanto más grande la partícula, menos daño porque se queda en los bronquios. Las peores son las de 2,5 micras, que pueden penetrar en la sangre", ha explicado el doctor Díaz, que ha especificado que provienen de los vehículos. En este sentido, hay más en el diésel y son más pequeñas, ha agregado.
Pero los efectos de la contaminación sobre la salud son aún más acusados en cuanto a las enfermedades respiratorias que resultan de la exposición a la misma se refiere y suceden ya en un niño todavía nonato, ha matizado la coordinadora del Área de Enfermedades Respiratorias Ocupacionales y Medioambientales de SEPAR, la doctora Isabel Urrutia.
La contaminación atmosférica afecta a la placenta y ocasiona que los niños nazcan con bajo peso, problemas en el sistema inmune y una función pulmonar disminuida, según la experta. Además, según un estudio que ha citado la doctora Urrutia, un adolescente expuesto a un ambiente contaminado tiene cuatro veces más probabilidades de tener una función pulmonar más baja.
Aproximadamente 600.000 niños menores de cinco años mueren cada año por la contaminación y ésta aumenta el riesgo de presentar infecciones respiratorias y asma, además de los problemas descritos. En este sentido, la contaminación representa más del 50 por ciento del total de los casos de neumonía, una de las principales causas de muerte en infantil a nivel mundial.
ALERGIAS, ASMA Y EPOC
Por otra parte, Urrutia ha aludido al incremento del número de alergias por la contaminación. "Los pólenes tienen ahora más proteínas que son más agresivas, además de que las partículas de diésel transportan el polen", ha explicado la experta.
En cuanto a las dos patologías respiratorias más prevalentes en la población, el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), según Urrutia, la contaminación exacerba los ataques de ambas. En personas que las sufren, los días en los que los índices de contaminación superan los límites establecidos aumentan los ingresos hospitalarios, las consultas médicas y las atenciones en urgencias, ha apuntado Urrutia.
"También la contaminación es un factor de riesgo para debutar en asma", algo que también se sospecha de la EPOC, aunque "no hay evidencia científica 100 por ciento fiable", ha reconocido la doctora.
LA MORTALIDAD ES "EL PICO DE LA PIRÁMIDE"
En referencia a la mortalidad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en más de 7 millones las muertes anuales debidas a la contaminación. De hecho, el 92 por ciento de la población mundial vive en áreas cuya contaminación supera los límites impuestos por la OMS.
Pero la contaminación también causa muerte prematura. Se estima que la contaminación del aire causa 4,2 millones de muertes tempranas en todo el mundo al año.
No obstante, "debajo de las muertes prematuras hay ingresos hospitalarios o uso de medicamentos", ha especificado el doctor Díaz, que ha instado a no centrarse tanto en la mortalidad resultante de la contaminación. "En una pirámide, sería el pico. Muere el que ya tiene la patología", ha explicado.
Sendos expertos han coincidido en que los grupos poblacionales más susceptibles a desarrollar problemas de este tipo causados por la contaminación son los niños y las personas mayores.
El doctor Díaz, por su parte, ha añadido a los enfermos crónicos y las personas con bajo nivel socioeconómico. De hecho, casi el 90 por ciento de las muertes relacionadas con la contaminación del aire se produce en países de ingresos bajos y medianos, y casi dos de cada tres ocurren en regiones de Asia sudoriental y del Pacífico occidental.