MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Dos mutaciones genéticas conocidas inducen vías que mejoran la capacidad del cáncer de páncreas para invadir tejidos y evadir el sistema inmunitario. Los investigadores han descubierto ahora los detalles moleculares de este proceso que proporcionan información sobre objetivos farmacológicos para inmunoterapias, según publican en la revista 'Proceedings of the National Academy of Science' (PNAS).
Las mutaciones en los genes KRAS y TP53 están estrechamente relacionadas con el adenocarcinoma ductal pancreático, con mucho, el tipo más común de cáncer de páncreas.
Los cánceres de páncreas a menudo son malignos cuando se diagnostican, lo que hace que su tasa de supervivencia a cinco años sea extremadamente baja, menos del diez por ciento. Por lo tanto, comprender cómo evoluciona a nivel molecular podría ayudar al desarrollo de fármacos contra el cáncer.
Hisataka Sabe, de la Universidad de Hokkaido, en Japón, y sus colegas realizaron pruebas en células cancerosas humanas y en modelos de ratón de la enfermedad para investigar el papel de las mutaciones del gen KRAS y TP53 en el adenocarcinoma ductal pancreático.
Descubrieron que las mutaciones en KRAS aumentaron la producción de dos proteínas, llamadas ARF6 y AMAP1, que descubrieron previamente que constituyen una vía de señalización involucrada en la invasión de células cancerosas y malignidad.
También se encontró que las mutaciones en el gen TP53 facilitan la activación de ARF6, además de causar una vía metabólica, llamada vía de mevalonato, que se dispara. Esta vía es conocida por su papel en la mejora de la invasividad de algunos tipos de cáncer.
Investigaciones adicionales de la vía ARF6-AMAP1 descubrieron que estaba involucrada en la promoción de la expresión en la superficie celular de una proteína de punto de control inmune, llamada PD-L1, en las células cancerosas, además de mejorar su reciclaje dentro de la célula.
La expresión de PD-L1 en las células cancerosas les ayuda a esconderse del sistema inmune, evitando el ataque. Los genes KRAS y TP53 mutados, y la sobreactivación de la ruta del mevalonato, desempeñaron papeles cruciales en la eventual expresión de la superficie celular y el reciclaje de PD-L1.
"Descubrimos que dos mutaciones conductoras bien conocidas del cáncer de páncreas pueden promover tanto la invasión a otros tejidos como la evasión del sistema inmune a través de la promoción de la vía ARF6. Esto significa que pueden desarrollarse tumores malignos en paralelo con la oncogénesis, lo que dificulta la detección de células cancerosas en su etapa inicial", explica Hisataka Sabe.
"Todavía se necesitan más estudios para determinar el alcance de la participación de PD-L1 en la evasión inmune --admite--. También se necesitan estudios para considerar si los medicamentos dirigidos a PD-L1 y ARF6 pueden hacer que las células de cáncer de páncreas sean más susceptibles al ataque del sistema inmune".