Por qué cuidar la parte emocional de la cesárea y 3 consejos fundamentales para el posparto

Archivo - Madre dando a luz a un beb
Archivo - Madre dando a luz a un beb - ISTOCK/ORBON ALIJA - Archivo
Publicado: jueves, 15 junio 2023 8:40

   MADRID, 15 Jun. (EDIZIONES) -

   Siempre preparamos el embarazo y el parto, y nunca el posparto, que es realmente lo intenso y más alargado en el tiempo. De hecho, si es la primera vez que vas a dar a luz poco habrás oído hablar del posparto, por lo que todo conocimiento sobre esta etapa es poco.

   En España, según datos del Instituto Nacional de Estadística, tienen lugar en uno de cada cuatro partos (24,88% de los casos), una cifra muy por encima de lo indicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomienda que las tasas no superen el 10-15% de los casos; situando a nuestro país como uno de los europeos con mayores tasas en este sentido.

Ascensión Gómez López es matrona y fisioterapeuta y precisamente acaba de publicar un libro en esta línea, 'Puérpera perdida. La transformación vital posparto' (Oberon), con el que pretende aportar toda serie de consejos sobre esta etapa tan importante en la vida de las madres.

   Muchos partos terminan en cesárea porque es la única forma de que el bebé salga. Sobre estas hay muchísimo desconocimiento, remarca la entrevistada por Infosalus, quien destaca que nunca jamás hay que olvidar que se trata de una cirugía mayor, con todos los riesgos que implica, y, como tal, requiere de unos cuidados postoperatorios, algo que cuando somos madres, o incluso a los propios profesionales se les olvida, según considera.

   "Muchas de estas mujeres, funcionan, cuidan a su bebé, hacen las tareas de la casa, y en realidad necesitan descanso, cuidado. Llevas una herida, una cicatriz y los tejidos hay que cuidarlos. Es necesario reposo y descanso tras una operación, y más en esta etapa que ahora siendo madre no tienes, cuando en otra circunstancia sí lo tendrías. No es lo mismo un parto fisiológico que una cesárea y hay que tenerlo muy presente para no agravar la situación", insiste esta especialista.

   Se trata de mujeres, según recuerda Gómez López, que necesitan analgesia, cuidados de heridas, cuidar los movimientos, vigilar la forma en la que hacen las cargas o, por ejemplo, cómo se ponen de pie. "No es lo mismo que parir, las cosas son como son, ni a nivel físico, ni a nivel emocional, y esto hay que tenerlo muy presente", insiste esta matrona.

NO OLVIDAR LA PARTE EMOCIONAL

   La cesárea no es una opción de parto, según reitera, sino una solución para una situación clínica importante y que requiere que el bebé nazca de esa manera. Aquí resalta que una de las cosas que más afectan a las mujeres que padecen una cesárea es que no se va a producir ese enamoramiento espontáneo, ese vínculo inmediato con el hijo recién nacido.

   "Estás en 'shock' y necesitas más tiempo para poder hacer esa piel con piel tan importante, especialmente en la cesárea, porque no hay el cóctel hormonal que sí se produce en el parto y aquí se necesita sostén y atención", añade.

"No eres mala madre", según reseña esta matrona, quien ella misma ha tenido una cesárea, e insiste en que se pasa muy mal emocionalmente con la cesárea: "Ese enamoramiento no tiene por qué ser como en un parto fisiológico, incluso se atraviesa el duelo de no pasar por el parto que la madre se imaginaba, que se tenía en su cabeza. Todo esto es mucho más difícil y las madres de cesárea necesitan un pedestal más grande".

   Con todo ello, lamenta que se ha banalizado algo la cesárea, que se hagan bien y rápido es una suerte, pero no le quita la importancia que tiene que es una cirugía mayor. Por eso, Ascensión Gómez ahonda en la necesidad de recuperar la confianza de cada madre y sanar esa herida emocional.

   "La peculiaridad de las cicatrices relacionadas con el parto y la cesárea es que puede asociarse a un fracaso, aunque no lo sea. El duelo por el parto soñado, el recuerdo de la vivencia de un parto traumático está impreso en el cuerpo a través de la cicatriz. Tocarla, removerla puede despertar emociones intensas, pero también puede ser un recordatorio permanente del aquello que no pudo ser. Es como grabar en tu piel la desconfianza en tu propio cuerpo, y trabajar todo esto va directamente relacionado con el trabajo corporal", añade.

   De hecho, sostiene que a veces no podremos trabajar con el cuerpo hasta que no hay un tratamiento psicológico previo, y otras veces solo el trabajo corporal podrá permitir el abordaje psicoemocional. "El cuerpo y la mente están unidos siempre y no se pueden separar. La cesárea, justificada o no, es una situación muy estresante, que siempre deja un impacto emocional tremendo", agrega.

PUNTOS A TENER EN CUENTA PARA EL POSPARTO

   En último lugar, Ascensión Gómez López, matrona y fisioterapeuta, apunta los tres siguientes consejos imprescindibles para el momento del posparto:

   1.- Para cuidar hay que cuidarse: "Esto es sobrevivir, es decir, no hay que quedar bien con nadie, ni hacer nada que no sea sobrevivir. El posparto es ese momento de darse tiempo, que las cosas básicas no se nos pueden olvidar. Muchas veces se nos olvida que para cuidar hay que cuidarse".

2.- Se necesita una red de apoyo y como madre recién parida no puedes estar gobernándolo todo, y necesitas estar en momento bebé y permitir que se te cuide; por tanto, necesitas apoyo de la familia, de la pareja, de los amigos, de gente que te facilite la comida, la compra, la logística, porque tus 24 horas del día van a ser bebé y descanso.

3.- Hay que dormir cuando duerme el bebé porque no hay otra posibilidad. Este no puede tener horario del adulto, sino que nosotros debemos adaptarnos, porque si el bebé no duerme no duerme nadie, y sin dormir no se puede vivir.