MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Tener niveles altos o bajos de colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL), o colesterol "bueno", está relacionado con un pequeño aumento del riesgo de demencia en adultos mayores, según un estudio publicado en la edición online de 'Neurology', la revista médica de la Academia Americana de Neurología.
Los autores precisan que el estudio no prueba que los niveles altos o bajos de colesterol HDL causen demencia sino que sólo muestra una asociación.
"Los estudios anteriores sobre este tema no han sido concluyentes y este estudio es especialmente informativo debido al gran número de participantes y al largo seguimiento --señala la autora del estudio Maria Glymour, de la Universidad de Boston (Estados Unidos)--. Esta información nos permitió estudiar los vínculos con la demencia en toda la gama de niveles de colesterol y lograr estimaciones precisas incluso para personas con niveles de colesterol bastante altos o bastante bajos".
En el estudio participaron 184.367 personas del Plan de Salud Kaiser Permanente del Norte de California, con una edad media de 70 años que no padecían demencia al inicio del estudio. Con fines de investigación, rellenaron una encuesta sobre su comportamiento en materia de salud y se les midió el nivel de colesterol durante las visitas rutinarias de atención sanitaria una media de 2,5 veces en los dos años siguientes.
A continuación, se les realizó un seguimiento dentro del sistema sanitario de Kaiser a través de historiales médicos electrónicos durante una media de nueve años. Durante ese tiempo, 25.214 personas desarrollaron demencia.
El nivel medio de colesterol HDL era de 53,7 miligramos por decilitro (mg/dL). Se consideran niveles saludables los superiores a 40 mg/dL en los varones y a 50 mg/dL en las mujeres. Los participantes se dividieron en cinco grupos en función de sus niveles de colesterol HDL.
Las personas con los niveles más altos de colesterol HDL tenían una tasa de demencia un 15% mayor que las del grupo intermedio. Los que tenían los niveles más bajos presentaban un 7% más de demencia que los del grupo intermedio.
Estos resultados tuvieron en cuenta otros factores que podrían afectar al riesgo de demencia, como el consumo de alcohol, la hipertensión, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
Los investigadores sólo hallaron una ligera relación entre las lipoproteínas de baja densidad, o colesterol "malo", y el riesgo de demencia.
"El aumento del riesgo de demencia tanto con niveles altos como bajos de colesterol HDL fue inesperado, pero estos aumentos son pequeños y su importancia clínica es incierta --señala Glymour--. Por el contrario, no encontramos ninguna asociación entre el colesterol LDL y el riesgo de demencia en la cohorte general del estudio".
"Nuestros resultados se suman a la evidencia de que el colesterol HDL tiene asociaciones igualmente complejas con la demencia como con la enfermedad cardíaca y el cáncer", resaltan.