MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio publicado por la revista científica 'Addiction' calcula que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a dejar de fumar a más de 50.000 personas al año en Inglaterra.
La investigación, dirigida por investigadores del University College de Londres y financiado por Cancer Research UK, se basa en la comprobación de que a medida que aumentaba el uso de cigarrillos electrónicos para intentar dejar de fumar desde 2011, también crecía la tasa de éxito de dejar el hábito.
Y cuando el aumento en el uso de cigarrillos electrónicos se ralentizó en 2015, también lo hizo el aumento en el éxito de los intentos por dejar de fumar. Esto llevó al equipo a calcular que en 2017 alrededor de entre 50.700 a 69.930 fumadores habían conseguido dejarlo y que, de lo contrario, habrían seguido fumando.
Este estudio utilizó datos del 'Estudio de herramientas para fumar', una serie de encuestas mensuales de hogares de personas de 16 años o más en Inglaterra, que se realizaron en forma transversal, desde 2006. Los datos se basaron en aproximadamente 1.200 fumadores del último año cada trimestre entre 2006 y 2017.
El análisis de series de tiempo evaluó la asociación entre el uso actual de cigarrillos electrónicos y el uso de cigarrillos electrónicos durante un intento de dejar de fumar, la tasa general de abandono, la tasa de éxito y el consumo promedio de cigarrillos.
La autora principal, la doctora Emma Beard, Asociada de Investigación Senior en UCL, explica que su estudio se basa en encuestas de población y ensayos clínicos que encuentran que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a los fumadores a dejar de fumar.
"Inglaterra parece haber encontrado un equilibrio razonable entre la regulación y la promoción de los cigarrillos electrónicos --señala--. La publicidad está estrictamente controlada, por lo que vemos muy poco uso de los cigarrillos electrónicos por parte de los nunca fumadores de cualquier edad, mientras que millones de fumadores los usan para tratar de dejar de fumar o reducir la cantidad que fuman".
Por su parte, George Butterworth, gerente principal de políticas de Cancer Research UK, advierte de que "los cigarrillos electrónicos son un producto relativamente nuevo, no están exentos de riesgos y aún no conocemos su impacto a largo plazo, por ello, recomendamos encarecidamente a los no fumadores que no los usen".
"Pero la investigación hasta ahora parece mostrar que vapear es menos dañino que fumar tabaco y puede ayudar a las personas a dejar de fumar, por lo que es bueno que más de 50.000 personas hayan logrado dejar de fumar en 2017. Pero para obtener la mejor oportunidad de dejar de fumar, busquen el apoyo de un servicio de deshabituación tabáquica, que es quién puede ayudarlo a encontrar las herramientas más adecuadas", recomienda.