MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) han descubierto, en un trabajo publicado en la revista 'Nature Communications', que la inhibición de la proteína p38 potencia la formación de nuevos vasos sanguíneos en tumores de colon, tanto en personas como en ratones.
Se trata, según han explicado los investigadores, liderados por el jefe del Laboratorio de Señalización y Ciclo Celular del IRB Barcelona, Ángel R. Nebreda, de un proceso llamado angiogénesis y que es "esencial" para que las células tumorales puedan alimentarse, crecer y, eventualmente, generar metástasis.
En concreto, los expertos han demostrado que la actividad de p38 es importante en un tipo determinado de células madre mesenquimales (CMM), las cuales tienen una alta plasticidad, se pueden localizar alrededor de los vasos sanguíneos y contribuyen a diferentes procesos, tales como el desarrollo tumoral.
Hasta ahora, se habían descrito funciones de p38 en células tumorales, pero se conocía muy poco sobre cómo actuaba esta proteína en las CMM y, aún menos, durante el proceso de angiogénesis. Por ello, el objetivo era analizar el papel de p38 en la formación de nuevos vasos sanguíneos durante la tumorigénesis, especialmente considerando la contribución de las CMM.
En este sentido, tal y como ha explicado Nebreda, el trabajo ha evidenciado que p38 reprime la angiogénesis actuando específicamente en las CMM. "Utilizando modelos genéticos de ratones, mostramos que la inhibición de p38 estimula la formación de nuevos vasos sanguíneos tanto en tumores, como durante la reparación del tejido dañado", ha añadido el experto.
Las conclusiones de este estudio permiten profundizar en el conocimiento de los mecanismos que regulan la formación de nuevos vasos sanguíneos, y podrían tener implicaciones terapéuticas, optimizando los tratamientos de tumores con quimioterapia, así como de enfermedades en las que la angiogénesis esté comprometida.
"Esperamos que el conocimiento biológico generado en este trabajo pueda ser aplicado en el futuro para lograr terapias más eficaces", ha zanjado la investigadora postdoctoral del IRB Barcelona y primera autora del artículo, Raquel Batlle.