MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
Veinte años después de la publicación del genoma humano, el 'plano' genético de la vida humana, un equipo de investigación internacional ha trazado el primer borrador de la secuencia del proteoma humano, el conjunto de proteínas expresadas por un genoma, una célula o un tejido.
"El día de hoy marca un hito significativo en nuestra comprensión general de la vida humana. Mientras que el genoma humano proporciona un 'plano' completo de los genes humanos, el proteoma humano identifica los bloques de construcción individuales de la vida codificados por este plano: las proteínas. Las proteínas interactúan para dar forma a todo, desde las enfermedades que amenazan la vida hasta la estructura celular de nuestros cuerpos", explica uno de los autores, Chris Overall, de la Universidad de Columbia Británica (Canadá).
Con el 90 por ciento de las proteínas del cuerpo humano ya mapeadas, el investigador apunta que los científicos tienen una comprensión más profunda de cómo las proteínas individuales interactúan para influir en la salud humana, proporcionando conocimientos sobre la prevención de enfermedades y la medicina individualizada.
Su trabajo puede tener implicaciones para los científicos que estudian los posibles tratamientos para COVID-19. "En COVID-19, por ejemplo, hay dos proteomas implicados, el del virus del SARS-CoV-2 y el de las células infectadas, ambos probablemente interactúan, modifican y cambian la función del otro. Comprender esta relación puede arrojar luz sobre por qué algunas células e individuos son más resistentes al COVID-19 y otros más vulnerables, proporcionando información funcional esencial sobre el cuerpo humano que la genómica por sí sola no puede responder", señala Overall.
Como muchas enfermedades humanas son el resultado de cambios en la composición o las funciones de las proteínas, el mapeo del proteoma refuerza las bases para el diagnóstico de enfermedades, la predicción de resultados, el tratamiento y la medicina de precisión.
"Los seres humanos comparten el 99,9 por ciento de su ADN entre los individuos, pero las deficiencias en las 'partes' del proteoma derivadas de mutaciones genéticas heredadas pueden dar lugar a enfermedades genéticas o a respuestas inmunitarias y celulares defectuosas o inadecuadas a factores estresantes ambientales, nutricionales y de infección. Conocer qué proteínas son clave para la protección contra las enfermedades, y las deficiencias en la expresión o la actividad que son distintivos de la enfermedad, puede informar a la medicina individualizada y al desarrollo de nuevas terapias", concluye el investigador, cuyo trabajo se ha publicado en la revista 'Nature Communications'.