La Biblioteca Nacional acoge desde hoy una exposición que analiza la lucha contra la malaria a lo largo de la historia

Actualizado: martes, 17 marzo 2009 14:46

Esta enfermedad provoca entre 200 y 300 millones de casos al año, y es la causa de entre 1,5 y 2,7 millones de muertes, principalmente en el África subsahariana

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Biblioteca Nacional acoge desde hoy y hasta el 7 de junio una exposición que analiza, a través de un recorrido cronológico, la lucha contra la malaria a lo largo de su historia, con el objetivo de concienciar acerca del problema que supone hoy en el mundo, así como ilustrar la importancia que tuvo en países de clima templado, y la manera en que se combatió esta enfermedad en países como España.

La directora de la Biblioteca Nacional, Milagros del Corral, señaló que esta exposición, que cuenta con la colaboración de Cruz Roja Española, el Centro de Investigación en Salud Internacional de Barcelona (CRESIB) y Obra Social Caja Madrid, es una oportunidad para dar a conocer los fondos del centro sobre ciencia, medicina y farmacia que forman parte de la muestra.

La exposición contiene un total de 150 piezas, entre las que se incluyen manuscritos, libros, dibujos, láminas, fotografías, carteles, instrumental de investigación y objetos médicos y farmacológicos provenientes de más de veinte entidades diferentes de Italia, Gran Bretaña y España, así como vídeos y una corta película que muestra las manifestaciones de la enfermedad, sus condicionantes socio-ambientales y los medios de combatirla.

El itinerario de la muestra se plantea en seis grandes espacios que acercan el problema hasta la situación actual. En primer lugar, 'Las fiebres intermitentes' es una aproximación a las distintas explicaciones que han recibido estos procesos febriles y los diferentes remedios que se idearon para su tratamiento a lo largo de la historia, y se organiza en torno al diagnóstico y prevención en la Antigüedad, las prácticas usadas para el tratamiento de las fiebres --entre las que se incluyen las cauterizaciones y sangrías y el empleo de vomitivos y purgantes-- y la utilización de la quina.

Otros espacios se dedican a'La quinina' --en el que se aborda tanto el trabajo de laboratorio como las dificultades en la obtención de la corteza de quina--; 'El descubrimiento del parásito y el vector'; 'Estrategias de lucha', en donde se transmite la idea de que, en tiempos relativamente cercanos, la malaria era una enfermedad asentada en buena parte del espacio europeo y norteamericano; 'Las campañas antipalúdicas españolas'; y, por último, 'La malaria en tiempos recientes', en cuyo espacio se destaca el reciente incremento en las actividades de control y los problemas persistentes.

FRENO PARA EL DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL

El director del CRESIB y del Centro de Investigación de Salud en Manhiça (Mozambique), Pedro L. Alonso, que fue galardonado con el premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en 2008, destacó que la malaria actualmente impide el desarrollo económico de los países endémicos, e indicó que en los últimos 35 años ha provocado un descenso importante del PIB. En cuanto al tratamiento, señaló que la terapia contra esta enfermedad comenzó con la corteza de la quina, que ha sido la base desde el siglo XIX, y se sigue usando para formas severas de la enfermedad. Además, explicó que para las formas más leves apareció la cloroquina, una sustancia "eficaz, barata y segura".

Sin embargo, este experto matizó que a finales de los años 60 se observaron focos de resistencia en el parásito, por lo que la cloroquina ha dejado de ser eficaz en determinadas regiones del mundo. "Esto llevó a la alarma, porque en ese momento no había buenos sustitutos", apuntó.

Por otro lado, destacó que el tratamiento con sulfadoxina tiene una alta eficacia, es útil para las formas más severas del paludismo y se adminsitra de forma oral, pero matizó que en ciertas zonas del sudeste asiático existe una preocupación, ya que se observa que el tratamiento prolongado con esta sustancia podría crear resitencias. "Esto refuerza el concepto de que hay que estar alerta", subrayó.

CAMBIO CLIMÁTICO Y RIESGO DE MALARIA EN EL SUR DE EUROPA

Por su parte, uno los comisarios de la exposición y uno de los mayores expertos en el campo de la malaria, José A. Nájera, alertó de que el cambio clímático podría favorecer el riesgo de que se den las condiciones favorables para la transmisión de la malaria, por lo que señaló que se han de mantener las condiciones sanitarias actuales para que esto no ocurra.

Por otro lado, explicó que las condiciones de vida de las áreas maláricas durante la primera mitad del siglo XX son similares a las de las zonas endémicas actuales, y apuntó que el desarrollo económico son visión social puede llegar a crear condiciones maléricas "graves", como sucede en la cuenca amazónica, las zonas de deforestación, Indonesia y otros países del sudeste asiático. "La malaria no sólo es consecuencia de la pobreza, sino del desarrollo desordenado y anárquico", subrayó.

La malaria provoca actualmente entre 200 y 300 millones de casos al año, y es la causa de entre 1,5 y 2,7 millones de muertes, principalmente en el África subsahariana. Esta tarde tendrá lugar la inauguración de la exposición, a la que acudirá el director del CRESIB, y que contará con la presencia del Ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria.