MADRID, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un estudio reciente realizado por Reebok ha analizado más de 60 ciudades de todo el mundo para revelar cuáles son las que más promueven el bienestar físico; a su vez, se analizan cuáles ciudades españolas son las que tienen los habitantes más activos, siendo estas Barcelona, Valencia y Zaragoza.
El estudio se basa en una amplia gama de métricas que orientan sobre el estado físico y la salud, como por ejemplo el nivel de actividad física, el porcentaje de personas inscritas en el gimnasio, el porcentaje de uso de bicicletas y otros valores relacionados con el ambiente.
Barcelona, con sus 130 parques, ocupa el primer lugar como la ciudad más fitness de España. Madrid, la capital, ocupa el cuarto lugar con solo el 2,29 por ciento de los empleados que usan la bicicleta para ir al trabajo, aunque 780.257 ciudadanos tienen una membresía de gimnasio.
Bilbao ofrece las membresías más caras, a 42,24 euros al mes. En cambio, las membresías más baratas se encuentran en Valencia, a 25,78 euros al mes. Valencia también tiene el mayor porcentaje de empleados que van en bicicleta al trabajo con un 12,9 por ciento, mientras que los residentes en Zaragoza son los más propensos a ir andando a su trabajo (37,5%).
Ninguna de las ciudades canarias está en la lista, pero la situación es distinta con las Islas Baleares. Ibiza y Palma de Mallorca se encuentran en el octavo y décimo lugar respectivamente.
¿CÓMO SE CLASIFICAN LAS CIUDADES DEL MUNDO?
Para el año 2016, el 28 por ciento de los adultos mayores de 18 años no eran lo suficientemente activos. Según la definición de la Organización Mundial de la Salud, esto significa que no practicaban "al menos 150 minutos de actividad física de intensidad moderada o 75 minutos de actividad física de intensidad vigorosa por semana".
Los países de ingresos altos se ven particularmente afectados por esta tendencia, debido a la prevalencia de trabajos de oficina, pero hacer ejercicio no tiene por qué significar pasar grandes cantidades de tiempo en el gimnasio.
Por su parte, el experto en nutrición y salud Juggy Sidhu explica que el hecho de que a una persona no le guste el ejercicio no debería definir sus niveles de actividad. "Sabemos que la actividad física tiene el poder de agregar años de vida y calidad a esos años, por lo que ser más activo debería ser una parte innegociable de la rutina, lo que no significa sudar en el gimnasio durante horas y horas", manifiesta.
Sin embargo, algunas ciudades ofrecen un entorno más adecuado para el 'fitness' que otras, gracias a su buena calidad del aire, su gran cantidad de espacios verdes y la existencia de gimnasios asequibles.
Ámsterdam ha sido coronada como la ciudad que promueve más el bienestar físico. La ciudad cuenta con el mayor número de personas que van al trabajo en bicicleta, casi el 46 por ciento, así como con un gran número de fanáticos del gimnasio, casi el 17,5 por ciento de la población.
Las personas que viven en Oslo tienen el mayor acceso a espacios verdes, con un 68 por ciento de la ciudad disponible para disfrutar de la naturaleza. Tokio tiene la menor cantidad de espacios verdes disponibles, con solo un 7,5 por ciento.
Quienes viven en Berlín, Alemania, tienen el mayor déficit de actividad física, con una puntuación de 42,2. En el extremo opuesto de la escala, Helsinki, que se encuentra en el tercer lugar, tiene las personas más activas con un nivel de solo 16,6 por déficit de actividad física.
Zúrich y Ginebra (Suiza) comparten las tasas de obesidad más bajas entre las 20 ciudades principales (19,5%). En el otro extremo de la escala, las ciudades canadienses de Montreal y Toronto tienen tasas de obesidad del 29,4 por ciento, a pesar de que Montreal tiene la membresía de gimnasio más barata, de 23,26 euros al mes. Solo 3 ciudades españolas logran entrar en la clasificación en buenas posiciones: Valencia (5), Madrid (10) y Barcelona (12).
REDEFINIR LA FORMA DE VER EL EJERCICIO
La actividad física no debe ser tediosa ni aburrida, según advierte Sidhu, quien destaca la importancia de redefinir la forma de pensar sobre la actividad física. "Con solo mencionarle la palabra 'actividad' a la mayoría de la población, ya encontramos un gran bloqueo mental en torno a los tipos de ejercicio que esta palabra connota, desde correr hasta ir a una clase en el gimnasio o ejecutar un entrenamiento de resistencia".
"Todas estas actividades parecen muy difíciles desde la perspectiva de un principiante: parece que requieren mucho tiempo y están 'fuera del alcance'", señala el nutricionista. Sin embargo, añade, "la actividad física es mucho más que movimiento y ejercicio formal. Es por esto que redefinir la actividad física para entenderla como 'movimiento' puede ser mucho más liberador", apunta. "Ver el ejercicio como una forma de mantenernos saludables y no solo como una forma de quemar calorías o cambiar nuestra apariencia hace que sea más fácil incorporarlo a nuestra vida diaria", expresa.
Mantenerse activo, concluye, Sidhu, "puede ser tan simple como dedicar más tiempo a pasatiempos, como explorar la naturaleza, practicar golf, unirse a deportes de equipo con compañeros o incluso llamar a un amigo para ponerse al día y salir a caminar".