Artrosis: cargas mal llevadas

Manos, artrosis
Foto: GETTY/NAYOMIEE
Actualizado: jueves, 18 junio 2015 10:39

MADRID, 18 Jun. (INFOSALUS) -

   La artrosis es una patología articular degenerativa caracterizada por un proceso de deterioro del cartílago mediado por una reacción inflamatoria. El ser humano está diseñado para la bipedestación que ocasiona cargas en las articulaciones. Si estas cargas no se realizan de forma equilibrada se van produciendo alteraciones en la articulación, el hueso y los tejidos circundantes. La consecuencia es un uso inadecuado de la articulación que termina produciendo disfunción y dolor.

   Según explica a Infosalus el doctor Antonio Torres, miembro del Área de Aparato Locomotor de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), el mal uso de las articulaciones determina la artrosis, un 80% de la población mayor de 80 años padece en algún grado artrosis, pero también los deportistas profesionales que han forzado las articulaciones en su práctica deportiva.

   El proceso biológico del envejecimiento también conlleva que se pueda desarrollar artrosis en alguna articulación. Las artrosis más prevalentes son las de cadera, rodilla y pie. Los factores de riesgo para el desarrollo de la artrosis son problemas de la sociedad actual como el sedentarismo, el exceso de peso o un uso inadecuado de las articulaciones.

  Los genes también influyen en una predisposición a padecer artrosis en determinadas articulaciones como en el caso de la desarrollada en las manos o las rodillas además de alteraciones congénitas como una desviación en la columna que conlleva una alteración en la carga de las articulaciones. Las enfermedades que debilitan el hueso también contribuyen al desarrollo de la artrosis.

   Más que de tratamiento el doctor Torres acentúa la prevención y seguir hábitos de vida más saludables como adelgazar, hacer ejercicio, estar bien hidratado y emplear una analgesia suave bien indicada como el paracetamol cuando se presentan dolores menores.

   Una vez que la artrosis ya existe la opción siempre pasa por eliminar carga para la articulación afectada mediante una bajada de peso, en el caso de las artrosis de rodilla, y tratar el dolor desde sus inicios de forma adecuada ya que hay que evitar que se convierta en dolor crónico. "Si es posible controlar el dolor mejora la funcionalidad de la persona y el deterioro es más lento", señala el médico de familia.

   Las medidas no farmacológicas suponen realizar ejercicio en general pero también dirigido a la artrosis que se padezca con fisioterapia realizada en casa durante 5 o 10 minutos al día, lo que reducirá los daños y ralentizará el proceso.

   "Las personas de más edad deben hacer uso de soportes como bastón, andador y zapatos adaptados a su problema que sean anchos, cómodos y que absorban la energía del caminar", aclara el doctor Torres.

NO RESIGNARSE AL DOLOR

   El tratamiento con fármacos supone el uso adecuado de los analgésicos, con pautas muy controladas, y de medicamentos que como el condroitín sulfato que buscan restituir los daños a través de sustancias similares a algún componente del cartílago, aunque la evidencia no termina de confirmar sus beneficios reales.

   Otro tratamiento posible son las infiltraciones de ácido hialurónico, un componente del cartílago articular que se administra a través de inyecciones intraarticulares con el objetivo de evitar el deterioro del cartílago e incluso mejorarlo. Sin embargo, también los resultados de terapias como estas han sido cuestionadas.

   Cuando la opción farmacológica no funciona está la cirugía para liberar la articulación o reemplazarla con una prótesis, intervenciones en las que se ha avanzado mucho en los pasados años y que proporcionan resultados satisfactorias.

   En la actualidad se ensayan de forma experimental nuevos tratamientos como las microperforaciones en el hueso dañado para implantar células madre o el uso de nuevas sustancias químicas que favorezcan el crecimiento del cartílago.

   "No hay que resignarse al dolor porque se trate de una persona mayor aunque la artrosis sea una enfermedad ligada a la edad hay que generar una mayor sensibilización y enfocarse al menor sufrimiento posible para la persona", afirma Torres.

EVITAR Y PERSONALIZAR LA ARTROSIS

   Hay tres aspectos que el doctor considera básicos: mantener un peso adecuado, realizar un ejercicio regular y acudir al médico cuando se presenten molestias que no se alivian con analgésicos. Hay otros aspectos que el médico de familia subraya para hacer frente a la artrosis:

   * Modificar las malas posturas forzadas: la ergonomía debería de extenderse a todas las actividades cotidianas ya sea en el trabajo pero también desde la escuela.

   * Si existe un patrón genético en la familia, como el habitual asociado a manos y rodillas, no hay que esperar a que duelan las articulaciones para poner medidas.

   * Hacer un buen uso de las articulaciones: no sobrepasar nuestros límites y ejercer buenas posturas no por cortesía sino por prevenir daños futuros.

   * Realizar ejercicios específicos para la articulación afectada: acudir al médico para saber qué ejercicios nos vienen bien según la artrosis que se padece. "No todo es bueno para todo el mundo, pedalear es realizar ejercicio pero en según que casos puede ser útil o no".

   * "No hay enfermedades sino enfermos": en la artrosis también se cumple esta aseveración y hay que dirigirse hacia aquella forma de la enfermedad que más afecte a la calidad de vida de quien la sufre.