MADRID 4 May. (EUROPA PRESS) -
Los niños discapacitados tienen un alto riesgo de desarrollar obesidad, según un estudio de la Universidad Witten/Herdecke publicado en el último número de la revista 'Deutsches Ärzteblatt Internacional', en el que Reinehr Thomas y su equipo apuntan algunas claves para prevenir o tratar este problema.
Según estos autores, hay muchas razones para que un niño discapacitado presente sobrepeso, como el que su propia discapacidad afecte a regiones cerebrales implicadas en la regulación del peso o bien porque la discapacidad sea física y le impida realizar cualquier tipo de ejercicio físico.
En cualquier caso, estos niños o adolescentes se ven limitados por su incapacidad y "las consecuencias del exceso de peso suelen ser más graves que para las personas sanas", ya que en ocasiones se suma a otros problemas como el aislamiento social, una movilidad limitada y la depresión.
Además, los actuales enfoques terapéuticos para obesos son de poco o ningún uso para los niños discapacitados, habiéndose iniciado pocos estudios para adaptarlos a sus discapacidades específicas.
En este sentido, Thomas y su equipo proponen que estos pacientes puedan recibir asistencia para reducir su exceso de peso instruyéndoles sobre la importancia de la nutrición y el ejercicio y, al mismo tiempo, ayudándoles a reducir los factores que restringen su movilidad.