Accidentes de tráfico, complicaciones durante embarazo y el parto, suicidio, violencia, sida y tuberculosis son las principales causas
MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
El 97 por ciento de las más de 2,6 millones de muertes que se registran cada año en jóvenes de 10 a 24 años se produce en países pobres o en vías de desarrollo, según afirma un estudio respaldado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y publicado en la revista 'The Lancet'.
La investigación ha determinado que los accidentes de tráfico, las complicaciones del embarazo y el parto, el suicidio, la violencia, el VIH/sida y la tuberculosis son las principales causas de mortalidad a nivel mundial entre las personas de este grupo de edad, según informó la OMS en un comunicado.
"De estos resultados se desprende que es necesario que se dediquen importantes inversiones a la cuestión, y no sólo en el sector de la salud, sino también en sectores como la educación, el bienestar, el transporte y la justicia, para que mejorar el acceso a la información y los servicios, y para ayudar a los jóvenes a evitar conductas de riesgo que puedan conducirles a la muerte", explicó la subdirectora general de la OMS de Salud Familiar y Comunitaria, Daisy Mafubelu.
"La mayoría de las causas de muerte entre los jóvenes son prevenibles y tratables", señala el informe, y por ello este estudio "tiene como objeto servir de base para la elaboración de políticas y programas, con el fin de lograr que mejoren sus vidas y disminuya el número de defunciones".
En este sentido, la OMS hace una serie de recomendaciones para reducir el impacto de ciertas conductas de riesgo en el incremento de las tasas de mortalidad en personas de este grupo de edad.
Para disminuir el número de accidentes de tráfico mortales, la OMS aconseja a los Gobiernos hacer cumplir "estrictamente" los límites de velocidad, establecer en 0,5 gramos por litro el nivel máximo de alcohol en sangre de los conductores, el fomento del uso de cascos de "buena calidad", y la utilización de los cinturones de seguridad.
Sobre las enfermedades de transmisión sexual, la OMS apuesta porque los más jóvenes "reciban educación sexual, tengan acceso a los preservativos y otros medios anticonceptivos, a un aborto seguro en la medida en que lo permita la legislación de cada país, a la atención prenatal y obstétrica, a orientación y pruebas de detección sobre el VIH, y a la atención y el tratamiento del VIH/sida".
MEJORAR EL ACCESO A LA ASISTENCIA SANITARIA
Asimismo, para reducir el número de suicidios y muertes violentas, este organismo recomienda promover una "participación positiva" de los padres en las vidas de los jóvenes, procurando disminuir el consumo de alcohol en la juventud, y reduciendo su acceso a las armas de fuego, armas blancas, plaguicidas y sedantes.
En este sentido, la OMS recuerda que las consecuencias inmediatas y a largo plazo de las enfermedades y los actos violentos se pueden "reducir significativamente" mejorando el acceso a la asistencia sanitaria y proporcionando tratamiento y apoyo a los jóvenes expuestos al maltrato de menores, la violencia juvenil y las agresiones sexuales.