MADRID 13 May. (EUROPA PRESS) -
Entre un 11 y un 27 por ciento de los adolescentes presentan conductas de riesgo para desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria (TCA), según ha explicado la pediatra en la sección de Nutrición y Errores Innatos del Metabolismo en el Complejo Hospitalario Universitario de Canarias (Santa Cruz de Tenerife), la doctora Mercedes Murray, en el marco del XXX Congreso de la Sociedad Española de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (SEGHNP).
Según ha concretado la doctora Murray durante el encuentro, la prevalencia de esta afección en niños pequeños "se estima entre un 1 y un 5 por ciento, si bien parece estar infraestimada e ir en aumento", mientras que en los TCA con distorsión de la imagen corporal, más propios del adolescente, "la prevalencia actual de anorexia y bulimia es del 0,19 y del 0,57 por ciento, respectivamente, y la de los TCA no especificados es superior al 3 por ciento".
A este respecto, desde la SEGHNP han precisado que estas cifras denotan la importancia de abordar los TCA "de forma precoz, especialmente entre la población pediátrica" ya que , tal y como ha subrayado la doctora Murray, "pueden afectar a niños y niñas de todas las edades y condiciones, tanto a los que están sanos, en principio, como a pacientes con diversos diagnósticos previos".
"La importancia de un abordaje precoz, individualizado y multidisciplinar se basa en la complejidad de estos trastornos y la posibilidad de cronificación si no se abordan adecuadamente, así como la importante morbilidad y afectación de la calidad de vida, tanto del niño como de sus cuidadores", ha añadido.
ABORDAJE DE LA DESNUTRICIÓN EN PACIENTES CON TCA
En este sentido, según han explicado desde la SEGHNP, la desnutrición ha demostrado dificultar, e incluso impedir en los casos más graves, el abordaje psicoterapéutico de los pacientes. "Se ha demostrado que en estados de desnutrición existe una afectación a nivel cerebral en menor o mayor medida que empeora la capacidad de razonamiento y dificulta el proceso terapéutico", ha detallado la experta en Pediatría.
"Podríamos decir de una forma coloquial que un cerebro que no come no puede pensar, lo que convierte en imprescindible focalizarse en primer lugar en conseguir una recuperación nutricional mínima que permita el abordaje del equipo de salud mental", ha añadido.
Por ello, ha asegurado que "todo paciente con TCA debe recibir una valoración nutricional cuidadosa que abarque anamnesis (antecedentes, patrón dietético detallado, pérdida ponderal, curva de crecimiento, síntomas asociados), exploración física que incluya antropometría y estudio de composición corporal si se dispone de los medios".
Así, en base a los resultados, se definirá el diagnóstico y se estimará su gravedad, "de manera que se puedan establecer las necesidades terapéuticas y requerimientos nutricionales", además de "valorar en qué medio es más adecuado el tratamiento y seguimiento (ambulatorio, hospitalización parcial o total)".
REHABILITACIÓN NUTRICIONAL INDIVIDUALIZADA
Para su abordaje, la SEGHNP ha demandado la necesidad de un plan de rehabilitación nutricional "individualizado y adaptado a cada paciente y tipo de trastorno". En niños con desnutrición, las necesidades calóricas, proteicas y de micronutrientes son mayores a los de un sujeto sano.
"Para ellos, los suplementos nutricionales pueden ser de gran ayuda en el proceso de recuperación, como un extra que facilite o acelere la renutrición, siempre que estos no sustituyan al alimento natural, y a la vez se trabaje con el paciente la importancia de recibir una dieta variada, saludable y adecuada", ha detallado la doctora.
NUEVA GUÍA PRÁCTICA
Ante este contexto, y dada la importancia del abordaje de la desnutrición en estos pacientes, Nutricia ha presentado el manual 'Manejo nutricional de los trastornos de la conducta alimentaria en pediatría', en el marco de esta última edición del congreso de la SEGHNP, como respuesta a la demanda de los especialistas involucrados en el manejo de estos trastornos.
"El manual aúna los conocimientos de profesionales de diversas especialidades y unifica la revisión de la bibliografía más actualizada. Todo ello sintetizado de una manera sencilla, con un enfoque muy práctico que facilita el trabajo de todos los profesionales, lo cual redundará en un beneficio para los pacientes atendidos", ha explicado la doctora Murray.
En palabras de la experta, "será especialmente útil para pediatras, dietistas, enfermeros, logopedas, terapeutas ocupacionales, etc. Puede ser también de ayuda para psiquiatras y psicólogos de cara a entender y manejar aspectos nutricionales".
En definitiva, "este manual surge con el objetivo de poner en valor la importancia del tratamiento nutricional en el abordaje de los pacientes con TCA. Como compañía B Corp, Nutricia muestra su compromiso con pacientes y profesionales mediante la creación de unas nuevas guías prácticas, actualizadas y específicas que faciliten la toma de decisiones de los expertos en su práctica clínica diaria", ha concluido el director médico de Nutricia, Gonzalo Zárate.