MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El director médico de IVI, el doctor Antonio Requena, afirma que no hay motivo que justifique posponer el deseo gestacional ni el inicio de un estudio o tratamiento de reproducción asistida, a causa de la vacuna contra la COVID-19, más teniendo en cuenta que el calendario oficial de vacunación no está definido para las mujeres en edad fértil.
No obstante, advierte de que en caso de que una mujer se quiera vacunar contra la COVID-19 antes o durante su gestación, desde IVI se recomienda que no se administren tipos de vacunas que contienen virus atenuados. En el caso de las vacunas de tipo ARNm, como la que se administra en este momento de Pfizer yBioNTech y la Moderna, que s eempezará a administrar en unos días, al no emplear vectores virales, se entiende que no hay riesgo de que la vacuna por sí misma conlleve un efecto negativo sobre el embrión.
Por otro lado, recuerda que hasta ahora no hay ningún dato publicado sobre un efecto teratogénico del virus en pacientes
contagiadas de COVID-19 durante el primer trimestre del embarazo. Aunque, si es cierto que el Ministerio de Sanidad recomienda posponerla en embarazadas la vacunación hasta el fin de la gestación.
"El inicio de un tratamiento es un buen momento para hacer medicina preventiva, y teniendo en cuenta que la vacunación se realiza en base a un calendario oficial, desde IVI recomendamos la administración de las vacunas de tipo ARNm antes de iniciar un tratamiento, teniendo en cuenta que solo tendrán que pasar dos semanas tras la administración de la segunda dosis para poder iniciar el tratamiento de reproducción asistida -inseminación o transferencia de embriones-", explica.
En caso de que a una mujer le coincida la vacunación con el tratamiento de fertilidad, "desde IVI recomendamos que se haga, pues es factible poder continuar con el desarrollo del ciclo y con la vacunación", añade Requena.