MADRID, 17 May. (EUROPA PRESS) -
La posibilidad de vitrificar los óvulos antes de los 35 años es "como tener un seguro de vida", afirma la directora médica de la clínica de reproducción asistida Fertilab Barcelona, Federica Moffa, recordando el hecho de que las mujeres tienen los óvulos contados cuando nacen, y a partir de esta edad no solo la reserva ovárica es más baja, sino que también la calidad de los óvulos está más afectada.
"Aunque la primera opción siempre será la concepción natural, el hecho de tener los óvulos vitrificados da un plus de seguridad y tranquilidad; siempre puedes recurrir a ellos más adelante", afirma la experta.
Así, explica que el interior del óvulo es "básicamente agua", con lo que "una congelación lenta provocaría la cristalización del líquido, rompiendo la membrana de la célula y haciendo inservible el óvulo", detalla la doctora Moffa, que asegura que con la técnica de la vitrificación se pueden recuperar el 90 por ciento de los ovocitos almacenados.
La técnica de la vitrificación consiste en sacar el agua del óvulo mediante un crioprotector hiperosmótico. Una vez ya está el agua extraída, se meten directamente en el nitrógeno líquido. Que el óvulo pase tan rápidamente de estado fluido a estado sólido hace que no solo se congele, sino que se vitrifique. "La vitrificación es un método muy rápido que permite una supervivencia post-congelación óptima", añade la doctora Moffa. "Con esta técnica, los óvulos pueden durar hasta 10 o 20 años congelados", detalla.
Desde Fertilab Barcelona se insiste en que, aunque la paciente tenga óvulos congelados en el banco, siempre se debe intentar primero la fecundación de manera natural. "La vitrificación es una inversión de tiempo", asegura la doctora. De esta manera, la recomendación de vitrificar los óvulos hasta los 35 es porque a partir de entonces, tal y como ha reiterado, la reserva ovárica es más baja y la también la calidad de los óvulos es menor.
"Pongamos que una mujer de 40 años ya tiene el 50 por ciento de sus óvulos con problemas. En nuestra clínica normalmente solemos extraer entre 15 y 20 óvulos, y de estos, los de mejor calidad, entre 14 y 18, los vitrificamos. Luego viene la tasa de supervivencia del 90 por ciento, con lo que tendríamos entre 13 y 17 óvulos válidos para poder fecundarlos en laboratorio con el esperma de la pareja o de donante", asegura la experta.
Aún así, también explica que aunque las normativas actuales en España no marcan un límite de edad para la primera fecundación en laboratorio, casi todas las clínicas de reproducción asistida, como Fertilab Barcelona, se marcan como límite los 50 años de edad de la paciente. "Creemos que ir más allá es ir a buscar un embarazo de riesgo", zanja Moffa.
EXTRACCIÓN Y TRATAMIENTO
Para extraer los óvulos se requiere de una estimulación previa mediante hormonas, y el procedimiento de extracción en sí se realiza con anestesia local. "La intervención requiere de un día de baja laboral por parte de la paciente, por las molestias que pueden venir después del proceso de extracción", asegura la doctora Moffa, que también explica que el tratamiento no tiene ningún efecto adverso sobre la salud de la mujer. Tampoco se ha demostrado que la vitrificación comporte riesgos de malformaciones de los bebés resultantes, una vez que los óvulos se han restituido y fecundado in vitro.
En cuanto a los óvulos que no se han utilizado, la ley marca que la paciente puede decidir entre tres destinos. El primero es su donación anónima y desinteresada a otra paciente; el segundo es su donación para investigación y el tercero es su destrucción.