BRUSELAS 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
España está a la cabeza de la Unión Europea en número de decomisos e incautaciones de cocaína que, en el año 2007, fueron de entre 30 y 40 toneladas, según se desprende del informe sobre la situación del tráfico y consumo de cocaína elaborado por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías en colaboración con Europol, la oficina policial europea. Después de España se sitúan Reino Unido, Italia y Alemania.
Además, fue también España el país que más laboratorios desmanteló, un total de diez en 2006, siete en 2007 y otros cinco en 2008, año en el que en el conjunto de la UE se eliminaron un total de 40 laboratorios que, según el análisis del Observatorio y Europol, eran en su mayoría de 'extracción secundaria' y tenían por tanto un objetivo diferente a los de América del Sur.
El informe establece igualmente un vínculo entre la oferta y la demanda de cocaína al considerar que las incautaciones proporcionan la perspectiva de la oferta del mercado de la droga. Así, aunque el enfoque y la intensidad de la labor policial afecten al número de incautaciones, su cifra puede considerarse un "indicador" de la situación de la oferta de un país.
La oferta, estimada a partir del número de incautaciones, se sitúa por encima de la media de la UE en Bélgica, Dinamarca, Irlanda, España y Reino Unido y cuatro, entre ellos España, se encuentran por encima de la media de la UE, lo que sugiere la existencia de distintos vínculos entre la oferta y la demanda.
Los autores del informe sostienen que el mercado europeo de cocaína podría ser más homogéneo en el futuro si aumenta la demanda y el volumen de droga disponible y se crean nuevas rutas de tráfico hacia y en el interior de Europa. La cocaína viene desde América del Sur hacia la UE a través del Océano Atlántico por vía marítima o aérea. Desde Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Surinam y Venezuela se envían, por mar, cargamentos de varias toneladas en dirección a las zonas costeras de España y Portugal.
Entre las técnicas más sofisticadas para introducir la droga descritas en el estudio se menciona la de combinar la base o clorhidrato de cocaína con otros materiales, como cera de abejas, plásticos o prendas de vestir, para luego extraer el estupefaciente en laboratorios especiales instalados en la UE.
Europa se ha convertido en un destino importante de la cocaína producida en Latinoamérica y en 2007 las aproximadamente 73 800 incautaciones que se llevaron a cabo en los Estados miembros de la UE, Croacia, Turquía y Noruega tuvieron como resultado la interceptación de casi 77 toneladas.
Con estas cifras, Europa ocupó el tercer lugar en el ranking mundial en cuanto a cocaína confiscada después de Latinoamérica y América del Norte. En cuanto a las rutas de contrabando que cruzan el Atlántico, el estudio describe las tres rutas principales con destino al continente europeo: la del norte, la central y la de África occidental. Además, muestra que la información policial apunta a desplazamientos de los puntos de desembarque dentro de las principales regiones de entrada a Europa: la península Ibérica y la región flamenco-neerlandesa.