MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
El conocimiento del nivel sérico de vitamina D y el tratamiento de su deficiencia "debería estar incluido en la política de salud en España", según el director gerente de EGOM y responsable de la Unidad de Cáncer de Mama, Manuel Marcos.
Así el especialista ha argumentado, durante la 'XV Jornadas de Actualización en Ginecología de HM Gabinete Velázquez que la inclusión de esta vitamina se debe a que tiene "un bajo coste, una excelente tolerabilidad y grandes beneficios".
Sin embargo, en España la determinación de vitamina D no está incluida de forma regular en los análisis de rutina, por lo que esta prueba generalmente solo se prescribe en determinadas situaciones de riesgo o patologías, ha explicado.
Además, ha especificado que existe un beneficio a la hora de determinar el nivel sérico de vitamina D en todos aquellos casos con riesgo de hipovitaminosis, como síndromes de malabsorción, edades avanzadas, pacientes institucionalizados, poblaciones con baja dosis de radiación solar o aquellas personas que toman medicamentos hipocalcemiantes, entre otros.
SU RELACIÓN CON LA OSTEOPOROSIS
En el caso de la mujer, se estima que más de dos millones de españolas viven con osteoporosis, caracterizada por una pérdida paulatina de masa ósea, y que deriva en una importante causa de fracturas que condicionan la calidad y esperanza de vida de quienes la padecen, ha recordado el especialista.
"La prevención y el tratamiento de la enfermedad a partir del control de los niveles de vitamina D es clave, ya que mejora la calidad del hueso y la absorción del calcio y, además, favorece la respuesta ante otras terapias", ha señalado.
La hipovitaminosis D es una "verdadera pandemia mundial", en el caso de la mujer, debería realizarse una determinación sanguínea del valor de la vitamina D para "poder corregir su defecto en todas las pacientes una vez que alcancen la etapa menopáusica".
De igual modo, ha recordado algunos datos como que la osteoporosis oscila entre el 26,5 por ciento de las mujeres de más de 50 años hasta el 80 por ciento de las mayores de 80.
Asimismo, ha puesto de manifiesto que tanto la calidad como la esperanza de vida de la mujer puede verse seriamente reducida a causa de las fracturas provocadas por la osteoporosis, especialmente las que se producen en la cadera.
"Y no hay que olvidar el estado psicológico de miedo y recelo ante determinados hábitos diarios por temor a caerse y fracturarse, que tanto condiciona su día a día", ha concluido.