MADRID 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y de la empresa AURA Innotive Robotics, liderados por Cecilia García Cena, han desarrollado el sistema robótico 'OSCANN desk' que, con una prueba "sencilla y rápida" que puede realizarse en la consulta del neurólogo, ofrece datos sobre el funcionamiento del cerebro a través de la medición de los movimientos oculares.
Este nuevo asistente robótico está en fase de ensayo clínico autorizado por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios en seis hospitales españoles y, gracias a técnicas de procesado de imagen y aprendizaje automático, sus resultados están permitiendo a los médicos diagnosticar de manera "precoz" enfermedades neurodegenerativas, además de realizar un pronóstico que permite la personalización del tratamiento.
"El ADN con el que ha sido desarrollada la tecnología tiene un gen vital: la accesibilidad. El coste no debe ser un impedimento para que la tecnología 'OSCANN desk' pueda usarse por todos los que la necesiten", ha dicho la investigadora principal.
La prueba se realiza en la consulta y el personal que la realiza selecciona la batería de test oculares que realizará al paciente. Cada test dura un minuto durante el cual el paciente debe mirar el estímulo que aparece en el monitor frente a él. Una vez acabada la prueba, el asistente robótico procesa las imágenes obtenidas, analiza los resultados y los compara con los modelos patológicos que se han desarrollado en los ensayos clínicos para, finalmente, generar el informe médico.
Los ensayos clínicos han permitido generar modelos de las patologías que se ensayan y, a través de técnicas de 'machine learning', se buscan similitudes y diferencias entre más de 500 variables de movimiento ocular, lo que permite además asistir en el diagnóstico diferencial de las patologías que se parecen. Además, se puede medir objetivamente el progreso de determinados síntomas, lo cual ayudará a los médicos a hacer un pronóstico sobre la enfermedad del paciente pudiendo así personalizar el tratamiento.
Actualmente los ensayos se están aplicando en Alzheimer, Parkinson, deterioro cognitivo leve, diferentes demencias o esclerosis múltiple. Además, se está colaborando en otras investigaciones clínicas en patologías como trastornos del espectro autista, epilepsia, diabetes, alcoholismo, migrañas, depresión y trastorno bipolar.