¿Cómo proteger a los niños del sol?

Una niña con gafas de sol, protección solar, radiación solar
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Actualizado: viernes, 10 agosto 2018 13:20


MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -

Para proteger a los más pequeños de las posibles consecuencias de la luz solar es recomendable vestirles con ropa de manga larga y que sea diseñada especialmente para ellos, evitando los chalecos o camisetas cortas, ya que el cuello y los hombros se queman con facilidad, según la dermatóloga especializada en Dermatología infantil del Hospital Vithas Xanit Internacional, Virginia Flores Secilla.

Además, la experta ha destacado que es recomendable que los niños lleven sombrero con ala superior a los cinco centímetros para mantener a la sombra la mayor superficie posible de la cabeza. Pero, en concreto, los bebés tienen que estar siempre a la sombra, y sobre todo los menores de 6 meses nunca deben exponerse directamente a la luz solar.

"No hay que temer al déficit de Vitamina D por la no exposición directa a la radiación solar", ha declarado la doctora, puesto que tanto la academia Americana de Pediatría (AAP) como el Comité de Nutrición de la Asociación Española de Pediatría recomiendan suplementar a los lactantes menores de un año con Vitamina D3 diariamente desde el nacimiento y a los mayores de esta edad y adolescentes que, por su dieta, no ingieran las necesidades diarias recomendadas.

Por otro lado, ha asegurado la población infantil es necesario el uso de fotoprotectores con filtros inorgánicos, como el óxido de zinc y el titanio, y evitar filtros orgánicos como la oxibenzona o el octocrileno, con el fin de minimizar riesgos derivados de la absorción sistémica o dermatitis alérgicas. El factor de protección debe ser entre 30 y 50 FPS, y además de amplio espectro de protección.

A la hora de aplicar el fotoprotector en forma de crema, la cual se debe probar antes en una zona reducida de la piel del niño para garantizar que no le produce una reacción, hay que aplicarla antes de exponerse al sol, y debe ser resistente al agua. Asimismo, ha insistido en que los padres deben dar ejemplo.

Por último, ha resaltado que los padres deben prestar mucha atención a la nariz, las orejas, los hombros, y la parte superior de los pies, que suelen ser partes del cuerpo que sufren más exposición directa.