La infección hospitalaria por la bacteria 'clostridium difficile' dobla su incidencia en la última década

Actualizado: viernes, 11 mayo 2012 14:12

MADRID 11 May. (EUROPA PRESS) -

El número de pacientes infectados por la bacteria 'clostridium difficile' se ha doblado en España en la última década, según estudios nacionales, por lo que expertos participantes en el 'XVI Congreso de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC)', que se celebra en el País Vasco, han apostado por realizar un correcto diagnóstico de este patógeno en las clínicas.

A pesar de ser la primera causa de diarrea nosocomial en los centros sanitarios, no se detecta en dos de cada tres casos. Este fenómeno radica en que las técnicas de detección que se emplean en los hospitales en la mayoría de los casso son rápidas pero poco sensibles y no completamente específicas.

"Otras técnicas mejoran la capacidad diagnóstica pero los resultados tardan más tiempo. Las recomendaciones europeas aconsejan utilizar una combinación de técnicas mediante algoritmos", ha explicado el director de la Unidad Clínica de Enfermedades Infecciosas y Microbiología del Hospital Universitario Virgen de Macarena, el doctor Jesús Rodríguez Baño.

Asimismo, otra de las razones de este infradiagnóstico es que los profesionales sanitarios, a veces, no sospechan la infección de los pacientes que están hospitalizados y, por ello, no solicitan las técnicas diagnósticas específicas. "Hacen falta programas de detección activa para aumentar el número de casos de los que se envían muestras, y por otro lado, aplicar las combinaciones de técnicas en base a las recomendaciones existentes, adaptadas a la epidemiología local y a los medios disponibles", ha argumentado.

RECAÍDAS

Por otro lado, entre un 15 y un 25 por ciento de los pacientes infectados sufre alguna recaída. "No se conocen bien los factores de riesgo que motivan una recurrencia", ha reconocido el jefe de Servicio de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, el doctor Emilio Bouza.

Normalmente, los pacientes suelen presentar esta enfermedad tras el uso de antibióticos que pueden reducir la flora intestinal normal dando lugar a que la bacteria prolifere produciendo toxinas, lo que provoca una reacción inflamatoria de la mucosa intestinal.

Por este motivo, a juicio de Bouza, existe "claramente" la necesidad de fármacos que disminuyan el riesgo de recurrencias, "que permitan tratamientos más cortos, y que sean bien tolerados". "Es muy deseable también que cualquiera de los fármacos nuevos que entren en el mercado tengan una baja capacidad de inducir el desarrollo de resistencias en aislados de Clostridium difficile", ha añadido.

Entre las actuales líneas de investigación para reducir estas infecciones se encuentra un antibiótico antimicrobiano dirigido específicamente a la bacteria pero sin efecto sobre las bacterias que componen la flora intestinal. Esta terapia, llamada fidaxomicina, "tiene como principal ventaja el asociarse a una disminución de los episodios recurrentes", ha precisado Bouza.

IMPORTANTE COSTE ECONÓMICO

Por otro lado, la infección por 'clostridium difficile' y las recaídas de los pacientes suponen un coste extra en la Sanidad que podría reducirse con prevención. De hacerlo, los hospitales españoles "podrían ahorrar 10.000 dólares por paciente", ha señalado el Bouza.

Este hecho se explica en que estos pacientes tienen que estar más días en el hospital y deben recibir antibióticos vía oral o intravenosa, lo que suma gastos a los centros sanitarios.

Aunque el perfil tipo del paciente infectado es una persona de más edad, con otras enfermedades de base , hospitalizado y que recibe antibiótico, en estos momentos, la infección está apareciendo en gente joven no hospitalizada, embarazadas y pacientes que acuden a un ambulatorio, es decir, que no la han adquirido específicamente en un hospital.