MADRID, 14 Ago. (EUROPA PRESS) -
Durante el año 2022 se produjo un incremento del 70 por ciento de personas que decidieron empezar un proceso terapéutico con respecto al año anterior, esto supone alrededor de 10.000 nuevos pacientes, siendo el 68,9 por ciento mujeres, según revela el I Estudio del Impacto Social en el Bienestar Emocional de TherapyChat, que ha analizado datos de más de 6.000 usuarios que acuden a terapia 'on line' de diferentes sexos, edades y procedencia geográfica.
En cuanto al género, la cifra de mujeres que acuden a terapia es bastante mayor que la de hombres ya que, según los datos del estudio, el 68,9 por ciento de las mujeres acuden a terapia, frente al 31,1 por ciento de hombres que lo hacen.
Asimismo, de todos los pacientes que solicitaron terapia durante el año 2022, más del 50 por ciento pertenecen al grupo de edad de entre 25 y 34 años, siguiéndoles con un 22 por ciento los más jóvenes [menores de 25 años], y con un 20 por ciento aquellos que se encuentran en el rango de entre 35 y 45 años.
Por último, los mayores de 45 años tienen una menor tendencia a solicitar servicios psicológicos 'on line', aunque el análisis de los datos destaca que su adopción ha crecido en un 200 por ciento con respecto al año pasado, superando la barrera social que históricamente han tenido.
Por su parte, tan solo un 27,4 por ciento de hombres menores de 25 años solicitó servicios psicológicos frente al 72,5 por ciento de las mujeres más jóvenes. El dato disminuye aún más en el grupo de 35 a 40 años, donde destacan un 86 por ciento de mujeres que comenzaron a acudir a consulta el año pasado ante un 14 por ciento de hombres.
A pesar de ello, los datos de pacientes masculinos han aumentado tres puntos porcentuales desde 2021, eliminando cada vez más la creencia social de que los hombres no pueden hablar de sus emociones y de que daña su imagen pedir ayuda.
"Siempre se ha permitido a las mujeres ser más expresivas con respecto a sus sentimientos y estados de ánimo, mientras que ha habido un fuerte prejuicio a favor de que los hombres sean más racionales y menos expresivos. Además, se dan factores neurofisiológicos. Sí que parece que las mujeres tendemos a darnos cuenta de esta información con más facilidad y a ponerle atención, lo cual no significa, en absoluto, que no seamos perfectamente tamente racionales, simplemente ponemos más atención a información que tiene que ver con las relaciones y los estados personales", afirma la psicóloga sanitaria de TherapyChart, Isabel Aranda.
Con respecto a las especialidades más solicitadas, el estudio revela que los problemas de autoestima han aumentado un 24 por ciento con respecto a 2021, la ansiedad un 21,7 por ciento y la terapia de pareja un 17,4 por ciento.
Los grupos de edad más jóvenes son los que acuden por problemas de ansiedad y autoestima, relacionados en su mayoría con etapas en la que se experimentan un mayor número de cambios en el ámbito personal y profesional, así como otros factores generacionales asociados.
"Entre la generación Z y los millenials es frecuente encontrar personas a las que no han enseñado a lidiar con la incertidumbre y la frustración, entre los que existe la costumbre de conseguir lo que quieren de forma inmediata y de evitar que una negativa les perturbe. Son más críticos con la autoridad y experimentan un mayor desacuerdo con los deberes laborales, que entran en colisión con los mensajes de libertad e independencia que reciben de las redes", explica la psicóloga Aranda.
El trabajo y entorno laboral son las principales fuentes de riesgo psicosocial que afectan al bienestar psicológico de las personas siendo, además, uno de los principales causantes de alteraciones como el estrés o la depresión.
En este sentido, los datos revelan que el sector de la educación, así como el de Management & Executive, se sitúan en la parte alta de la lista, siendo los que más demandan terapia, con un 13 por ciento en ambos casos. A ellos les sigue el sector sanitario (9%) y el de atención al cliente y administración (8%).
Por profesiones, destacan como aquellas con una mayor preocupación por su crecimiento personal y salud mental los profesores, educadores y maestros, en paralelo a consultores, analistas y gerentes de compañías. Por detrás, y también con una elevada predisposición a recurrir a terapia, se sitúan los enfermeros, médicos y fisioterapeutas, junto a administrativos, recepcionistas y camareros.
En todos los casos, los trastornos más comunes son la ansiedad y los problemas de autoestima y desarrollo personal.
"Ciertas profesiones en las que la exigencia de la tarea requiere una alta carga cognitiva o una alta carga relacional tienen más propensión a provocar estrés y, en algunos casos, burnout", afirma Isabel Aranda.
Por último, el estudio también muestra una diferencia por comunidades autónomas, siendo Madrid [27% de demanda], Cataluña [18%] y Andalucía [12%] las comunidades donde acudir a consulta es más común, seguidas de Islas Baleares y Aragón.Por su parte, los datos demuestran que las tasas de usuarios de terapia son mucho menores en Extremadura.