MADRID 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las enfermeras han destacado la necesidad de hacer visible la incontinencia anal, un tabú que sufren muchos españoles, mediante actividades de formación, información y educación en el abordaje de la incontinencia fecal, tanto a profesionales como a pacientes, cuidadores y sociedad en general, instaurando además consultas específicas sobre esta patología.
Así lo han manifestado durante el webinar 'Incontinencia fecal. Abordaje desde enfermería', organizado por el Instituto Superior de Formación Sanitaria (ISFOS) del Consejo General de Enfermería, en colaboración con ASIA (Asociación para la Incontinencia).
Además, han querido poner en valor el trabajo de las enfermeras expertas y cuidadoras de los pacientes. "Somos quien acompaña, educa y cuida de la sociedad en todas las etapas de la vida. Gracias a las enfermeras expertas en este ámbito y a la atención personalizada, estos pacientes mejoran enormemente su calidad de vida. Los gobiernos autonómicos y también el Ejecutivo central deben apostar y potenciar consultas enfermeras específicas sobre incontinencia", ha destacado el vicepresidente III del Consejo General de Enfermería y moderador de este Webinar, José Luis Cobos.
"Como profesionales sanitarios es muy importante que las enfermeras, ya sea en ámbito hospitalario, como en Atención Primaria, estemos formadas e informadas de las necesidades que tienen estos pacientes, pues hemos de contribuir a acabar con el tabú y la vergüenza que supone hablar de un tema tan íntimo. Dicen que lo que no se cuenta no existe, pero eso no es verdad, lo que sucede es que las personas que lo padecen lo sufren en silencio y deben saber que las enfermeras estamos ahí para acompañarlos en cualquier problema que puedan tener", ha señalado la directora de ISFOS, Pilar Fernández.
Aunque muchas veces invisible, la incontinencia fecal se da por causas tan diversas como una lesión obstétrica (la causa más frecuente), enfermedades neurológicas como la esclerosis múltiple, antecedentes de radioterapia pélvica, diabetes, entre otras. La casuística y la etiología son diversas y abarcan también a pacientes pediátricos; niños con patologías congénitas, neurológicas, o con la enfermedad de Hirschsprung, por ejemplo. Aunque la prevalencia aumenta con la edad, puede afectar en cualquier etapa de la vida.
Así, la coloproctóloga del Hospital Universitario La Princesa de Madrid, Elena Bermejo Marcos, ha señalado que "la incontinencia fecal no es sólo importante por sus características físicas, sino que es una patología que tiene un gran impacto psicológico por su repercusión en la calidad de vida del paciente".
"Lo más importante para mejorar esta situación es que el paciente dé el paso de consultar con su médico o enfermera, y una vez hecho esto podemos ya empezar a ayudarle. No siempre hace falta un tratamiento quirúrgico complejo. A veces simples modificaciones en la dieta, aportes de suplementos que puedan necesitar para compactar las heces, rehabilitación reglada del suelo pélvico, etc, pueden ser suficientes para mejorar los problemas de incontinencia. Los pacientes deben saber que merece la pena romper con el tabú, dar el paso y consultar sobre su problema de cara a mejorar el abordaje de esta patología", ha declarado.
Para ello, la figura de la enfermera resulta clave. Como ha especificado la enfermera de la planta de Cirugía General y Estomaterapeuta del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, Yovana Rodríguez Maldonado, "la enfermera tiene que ser el centro de los cuidados del paciente con incontinencia fecal".
"La enfermería está preparada, tiene capacidades técnicas, formativas, educacionales y culturales suficientes como para ser el centro de esos cuidados y, sobre todo, para servir de nexo de unión entre pacientes y otros profesionales que muchas veces olvidan la parte psicológica de afectación de esta patología", ha afirmado.
Así, ha subrayado que "existen numerosos artículos científicos que demuestran la necesidad imperiosa de tener una figura enfermera en esta patología, con consultas específicas para ello".
Sin embargo, y más allá de esas consultas, que no existen en la mayoría de los centros sanitarios, cualquier enfermera, en cualquier lugar ya sea en hospitalización o en Atención Primaria, también hay mucho que puede hacer por estos pacientes. Como ha incidido la presidenta de ASIA España, Àngels Roca Font, lo principal es preguntar. "Una pregunta puede cambiar la vida de un paciente, porque cuando te preguntan tú sí que lo cuentas".
"Para dar una adecuada respuesta necesitamos que las enfermeras sepan que la incontinencia afecta a todas las esperas de tu vida, pero que hay tratamiento, que puede tener solución y mejorar tu calidad de vida", ha concluido Roca Font.