VALENCIA 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Enfermería de la Comunitat Valenciana (CECOVA) ha reivindicado este lunes la presencia de enfermeras escolares en los centros docentes para auxiliar, ayudar y educar al alumnado diabéito, con motivo de la celebración del Día Mundial de la Diabetes, según ha informado la entidad en un comunicado.
El Grupo de Trabajo de Enfermería y Salud Escolar (ENSE) de la entidad ha explicado que existen dos tipos de diabetes. En la tipo I, que normalmente se diagnostica en la infancia y adolescencia, se produce poca o ninguna insulina y la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo y el cuerpo es incapaz de usarla para obtener energía.
Por su parte, la diabetes tipo II normalmente se diagnostica en la edad adulta y aquí hay un problema en como el cuerpo utiliza la insulina, que es necesaria para que el azúcar de la sangre entre en las células para que se almacene y se use posteriormente como energía. En este caso existe una resistencia a la insulina y la glucosa no entra en las células y no se obtiene energía.
El Grupo ENSE del CECOVA ha explicado que la mayoría de los pacientes que sufren diabetes tipo II padecen obesidad y, en este sentido, "no debemos olvidar que cada vez hay más niños en edad escolar con problemas de sobrepeso que pueden desarrollar esta enfermedad de adultos con lo cual es importante una enfermera escolar que eduque a esos niños y padres", ha añadido.
Por ello, se considera "muy importante" la labor de los profesionales de Enfermería en la escuela para prevenir este tipo de enfermedades y detectar posibles problemas de salud en edades tempranas. En este sentido, las enfermeras escolares del CECOVA recuerdan que si se cambian hábitos de vida por otros más saludables "podemos prevenir un sinfín de enfermedades en la edad adulta".
Así, el Grupo de Trabajo de ENSE del CECOVA reivindica la presencia continuada de una enfermera escolar en cada centro docente para educar en salud a toda la comunidad educativa (profesorado, alumnado y madres y padres) "para que adquieran hábitos de vida saludables que faciliten la prevención de la aparición de enfermedades".
Además, en el tema específico de la diabetes, las enfermeras escolares recuerdan que un niño diabético debe saber y conocer cuando tiene niveles altos o bajos de glucosa en sangre, qué alimentos son saludables, saber administrarse la insulina, además de saber que tiene que hacer ejercicio para llevar una vida sana y controlar sus niveles de glucemia.
En este sentido, el alumnado diabético escolarizado en centros escolares ordinarios necesita controles de glucemia y administración de la insulina en diferentes momentos de la jornada escolar y, por lo tanto, "que acuda una enfermera en un momento dado desde el centro de salud más cercano al colegio es solamente un parche, que, en ningún caso, es funcional, ya que no podemos planificar cuando un chico epiléptico sufrirá una crisis comicial o cuando una niña diabética descompensará sus niveles de glucemia".
Además, sostienen que la presencia continuada de profesionales de Enfermería Escolar en los centros docentes "también permitiría desplegar una amplia e importante labor de detección precoz y de prevención de los problemas de salud más prevalentes entre niños y jóvenes como, por ejemplo, la obesidad infantil o los trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia".
En este sentido, el Grupo de Trabajo de ENSE del CECOVA recuerda que el "lugar idóneo" para hacer una "efectiva promoción y educación en salud son los colegios e institutos, siendo las edades tempranas de la vida las que se han demostrado mas idóneas para ello".