MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y de la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) apuntan que en 2020 habrá más de 44.200 personas con un nuevo diagnóstico de cáncer colorrectal, cifra que, como recuerdan del Centro Médico Quirúrgico de Enfermedades Digestivas de Madrid, se traduce en 850 nuevos casos a la semana.
"La prevención, que incluye tanto diagnósticos precoces como eliminación de los factores de riesgo, es la única forma de atajar el crecimiento de esta enfermedad", apunta el doctor Carlos Suárez, especialista en aparato digestivo del Centro Médico Quirúrgico de Enfermedades Digestivas de Madrid.
El incremento anual de la incidencia de este tipo de cáncer, se puede deber, en palabras del doctor Suárez, a que, la población española está cada vez más envejecida; gracias a que las campañas de concienciación ciudadana, realizadas anualmente por las instituciones sanitarias y asociaciones de pacientes la población se somete a más pruebas diagnósticas; y a los malos hábitos de vida están cada vez más instaurados en la población, entre otras causas (predisposición genética).
FACTORES DE RIESGO
Existen diferentes tipos de factores de riesgo que no se pueden evitar, como la edad o haber tenido pólipos adenomatosos, cáncer colorrectal previo, enfermedad Inflamatoria Intestinal o ser diabéticos tipo II no insulinodependientes. Sin embargo, también existen factores de riesgo que sí pueden evitarse y que están ligados al actual estilo de vida. Es el caso de la alimentación, se recomienda una dieta rica en fibra (fruta y verdura) y alimentos ricos en calcio y Vitamina D (lácteos, frutos secos, legumbres, pescado azul), ya que pueden actúan como protectores frente al cáncer de colon.
Asimismo, es aconsejable reducir o eliminar el consumo de alchol y tabaco, ya que aumentan el riesgo de desarrollo de pólipos en la mucosa del colon. Aunque tienen un origen benigno, con el paso del tiempo tienen una alta capacidad de malignizarse y convertirse en un cáncer de colon si no son extirpados a tiempo. Además, recomiendan evitar el sedentarismo y la obesidad.
"El 95% de los casos de cáncer colorrectal tienen su origen en un pólipo colónico. Pueden pasar años desde la aparición del pólipo hasta su malignización. Además, en sus primeras etapas (carcinoma in situ), es decir, cuando todavía no ha afectado a la mucosa del colon, no presenta síntomas. Por este motivo, se recomienda realizar colonoscopias a toda la población a partir de los 50 años, ya que además permite extirpar pólipos durante la realización de la misma", añade el especialista de CMED.
COLONOSCOPIA, PREVENIR O DETECTAR
El cáncer de colon afecta principalmente a personas mayores de 50, aunque también puede desarrollarse en personas jóvenes. El motivo es que la edad aumenta las posibilidades de desarrollar pólipos en el intestino grueso, precursores de la mayoría de los cánceres de colon si no son extirpados a tiempo. La pauta más recomendable es hacer una colonoscopia cada 4 años.
También se recomienda si un familiar cercano ha padecido esta enfermedad aumentan las posibilidades de desarrollar un cáncer de colon. En este caso, está indicada la realización de una colonoscopia a partir de los 40 años, con una periodicidad de 4 años.
Además, de en ersonas con antecedentes de pólipos: la presencia de pólipos en el colon puede indicar una predisposición a que aparezcan nuevos. Por este motivo, la colonoscopia está indicada de forma anual y la periodicidad irá aumentando según vayan apareciendo resultados negativos.
En personas con enfermedades inflamatorias intestinales crónicas como pueden ser la Enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa. se recomienda la colonoscopia a partir de los 40 años con una periodicidad de 4 años.
El experto recuerda que existen otras pruebas diagnósticas menos invasivas que la colonoscopia, como son la colonoscopia virtual (permite una visión completa en 3D del colon pero no la extirpación de pólipos en caso de existir), el test en sangre Septina 9 (que detecta un gen que está presenta en más del 90% de los casos de cáncer de colon), el test de sangre oculta en heces, el cribado celular en heces y las determinaciones genéticas.