MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los mosquitos que aterrizaron en las superficies recubiertas con el compuesto antimalárico atovacuona quedaron completamente bloqueados del desarrollo de 'Plasmodium falciparum' ('P. Falciparum'), el parásito que causa la malaria, según revela una nueva investigación dirigida por la Escuela de Salud Pública TH Chan dela Universidad de Harvard, en Cambridge, Massachusetts, Estados Unidos.
El estudio demostró que la atovacuona, un ingrediente activo de los medicamentos que se usa comúnmente en los humanos para prevenir y tratar la malaria, se puede absorber a través del tarso (patas) de los mosquitos y evita que los insectos desarrollen y propaguen el parásito. Los hallazgos indican que el tratamiento de mosquiteros con atovacuona o compuestos similares sería una forma efectiva de reducir la carga de la malaria y mitigar significativamente el problema creciente de la resistencia a los insecticidas.
"Los mosquitos son organismos increíblemente resistentes que han desarrollado resistencia contra cada insecticida que se ha usado para matarlos. Al eliminar los parásitos de la malaria dentro del mosquito en lugar de matarlo, podemos evitar esta resistencia y prevenir la transmisión de la malaria", afirma Flaminia Catteruccia, profesora de Inmunología y Enfermedades Infecciosas.
"En última instancia, el uso de antimaláricos en mosquiteros podría ayudar a eliminar esta enfermedad devastadora. Es una idea simple pero innovadora que es segura para las personas que usan mosquiteros y que son amigables con el medio ambiente", agrega esta investigadora, cuyo trabajo se publica en la edición digital de este miércoles de 'Nature'.
La malaria representa un riesgo para casi la mitad de la población mundial. Anualmente, más de 200 millones de personas se enferman de malaria y más de 400.000 personas mueren a causa de ella. Durante los últimos 20 años, los mosquiteros tratados con insecticidas de larga duración que matan a los mosquitos han reducido significativamente la carga mundial de malaria.
Se estima que los mosquiteros son responsables del 68 por ciento de todos los casos de malaria evitados desde el año 2000. Sin embargo, en los últimos años se ha observado un aumento en los mosquitos que son resistentes a los insecticidas de uso más común. En algunos puntos calientes de malaria, existe una resistencia casi total a los piretroides, uno de los grupos clave de insecticidas actualmente en uso.
La disminución de la efectividad de los insecticidas es una emergencia de salud pública que amenaza con deshacer décadas de progreso hacia el control de la malaria y destaca la necesidad urgente de desarrollar nuevos enfoques para detener la propagación de la enfermedad.
MAYOR IMPACTO EN ÁREAS CON NIVELES ELEVADOS DE RESISTENCIA A INSECTICIDAS
Para este estudio, los investigadores razonaron que podrían introducir compuestos antimaláricos a los mosquitos 'Anopheles' de una manera similar a la de un mosquito que hace contacto con insecticidas en una mosquitera. En lugar de matar a los mosquitos, el objetivo era darles un tratamiento profiláctico para que no pudieran desarrollar y transmitir el parásito causante de la malaria.
Para probar el enfoque, recubrieron las superficies de vidrio con atovacuona y las cubrieron con un vaso de plástico. Luego se introdujeron mosquitos hembra en el vaso. Antes o inmediatamente después de que los mosquitos hicieran contacto con el vidrio cubierto con atovacuona, los científicos los infectaron con 'P. Falciparum'. A lo largo del estudio, se expuso a los mosquitos a diferentes concentraciones de atovacuona y se mantuvieron en las tazas durante diferentes periodos de tiempo.
El estudio descubrió que el desarrollo de 'P. Falciparum' estaba completamente bloqueado a concentraciones relativamente bajas de atovacuona y cuando los mosquitos estaban expuestos durante solo seis minutos, lo que es comparable al tiempo que los mosquitos salvajes pasan en las mosquiteras tratadas con insecticida. Los científicos tuvieron un éxito similar al usar otros compuestos similares a la atovacuona. Aunque la atovacuona mató a los parásitos de manera efectiva, no tuvo efectos en la vida o reproducción del mosquito.
"Cuando colocamos estos datos en un modelo matemático que usa datos del mundo real sobre resistencia a insecticidas, rendimiento de mosquiteros y prevalencia de malaria, mostró que el complemento de mosquiteros convencionales con un compuesto como atovacuona podría reducir considerablemente la transmisión de la malaria en casi todas las condiciones que teníamos para en África --afirma el autor principal del artículo --Douglas Paton--. Lo que realmente nos emocionó es que también mostró que esta nueva intervención tendría el mayor impacto en las áreas con los niveles más altos de resistencia a los insecticidas contra los mosquitos".